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jueves, 28 de marzo de 2013

Miguel Hernández estaba en todos los recitales de Paco Llorca


Foto tomada del libro "Paco Llorca, semblanzas del arte", de Mariano Estrada


Miguel Hernández estaba en todos los recitales de Paco Llorca

En el año 1992, con motivo del quincuagésimo aniversario de la muerte de Miguel Hernández y sin otra compensación que la íntima satisfacción de su espíritu, Paco Llorca le dedicó un entrañable homenaje. La figura de  Miguel Hernández destacaba sobre el elenco de poetas de su más exigente predilección. Poemas como la Elegía a Ramón Sijé, Para la Libertad o Aceituneros eran de una presencia constante en sus selectos recitales. También solía incluir en los mismos mi poema "Versos” dedicado  a Miguel Hernández, con lo que yo también me sentía partícipe de sus cordiales ofrendas al poeta: "Trozos de cárcel y pueblo / Filos de reja y espada /¡Cuánto es el luto del hierro/ tras las paredes de España!"...

Hoy quiere el azar que, a ocho años vista de la muerte de Paco Llorca, ambos muertos ilustres reciban un homenaje conjunto. Creo que merecidamente conjunto. Para ello contaremos con la poesía visual de nuestro amigo Fernando Medrano, la poesía escrita del propio Miguel Hernández y la de quien firma estas líneas y la poesía narrativa de José Luis V. Ferris, de quien cabe destacar -al margen de los méritos expuestos en su jugoso curriculum -,  que es un zahorí de la belleza, un alicantino ya insigne, un confesado admirador de Paco LLorca -al que oyó recitar en vida alguna vez- y un gran conocedor de la Obra y de la Figura del poeta oriolano, de cuya Fundación también es miembro reconocido.

En este leve receso de la autopista por la que vertiginosamente nos dirigimos -nadie sabe hacia dónde-, nos vendrá bien la frescura de unas imágenes relajantes, de unas palabras confortadoras, de unos paraísos soñados en los que no empujan los trenes del agobio... ¿Un acto de refrigeración de las inteligencias? Sí, un acto puro de amor, un acto de belleza reflexiva... (18-03-2000)

…Y aún otro recuerdo: un recuerdo rendido a nuestro querido poeta Miguel Hernández en el 50 aniversario de su muerte. Miguel Hernández ha estado presente de forma destacada en cada uno de los recitales que Paco Llorca ha ofrecido a lo largo de estos 15 años no solo en Benidorm (donde además le ha dedicado un recital monográfico), sino también en Madrid, en Toledo, en Alicante o en Oslo. Sirva este pequeño apartado como reconocimiento del hombre y del poeta, puesto que como hombre fue íntegro y como poeta nos ha legado una obra que escribió con el corazón y la sangre. (03-03-1992)

Os dejo un poema emblemático del poeta de Orihuela.

Para la libertad

Para la libertad sangro, lucho, pervivo.
Para la libertad, mis ojos y mis manos,
como un árbol carnal, generoso y cautivo,
doy a los cirujanos.

Para la libertad siento más corazones
que arenas en mi pecho: dan espumas mis venas,
y entro en los hospitales, y entro en los algodones
como en las azucenas.
Para la libertad me desprendo a balazos
de los que han revolcado su estatua por el lodo.
Y me desprendo a golpes de mis pies, de mis brazos,
de mi casa, de todo.

Porque donde unas cuencas vacías amanezcan,
ella pondrá dos piedras de futura mirada
y hará que nuevos brazos y nuevas piernas crezcan
en la carne talada.

Retoñarán aladas de savia sin otoño
reliquias de mi cuerpo que pierdo en cada herida.
Porque soy como el árbol talado, que retoño:
porque aún tengo la vida.

Miguel Hernández, El hombre acecha, (1938-39)

Mariano Estrada, Paisajes Literarios

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