Rosa y Mariano, en el Trestellador de Benimantell, Alicante
Lo que toco mejor es el violón
Divertimento para acabar el año
A la vista
de una memorable fotografía en la que se me ve tocando la guitarra, alguien muy
cercano me hizo esta pregunta:
-Mariano, ¿qué ha sido de tus aficiones y escarceos musicales? Yo sé que has tocado muchas cuerdas.
-Es verdad, he tocado muchas cuerdas y muchos palos. Por ejemplo: toqué una vieja guitarra que, teniendo talle de flor, acabé abandonando en un trastero. También toqué la flauta, pero vi que las pastoras preferían el rabel y las urbanitas suspiraban más bien por el contrabajo en los salones de jazz. Antes había tocado la armónica, pero ella era casta y pura y no quiso que pasáramos a mayores. Después canté en un coro, del que tuve que distanciarme por culpa de un traslado de residencia…
-Mariano, ¿qué ha sido de tus aficiones y escarceos musicales? Yo sé que has tocado muchas cuerdas.
-Es verdad, he tocado muchas cuerdas y muchos palos. Por ejemplo: toqué una vieja guitarra que, teniendo talle de flor, acabé abandonando en un trastero. También toqué la flauta, pero vi que las pastoras preferían el rabel y las urbanitas suspiraban más bien por el contrabajo en los salones de jazz. Antes había tocado la armónica, pero ella era casta y pura y no quiso que pasáramos a mayores. Después canté en un coro, del que tuve que distanciarme por culpa de un traslado de residencia…