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jueves, 30 de diciembre de 2010

Llámame insistencia


Los ojos de Lidia

Llámame insistencia

Llevaba un día gris en la expresión intensa de la cara. Pero no era un lunes, sino una honda y acerada pena. Entonces la miré y le dije:

miércoles, 29 de diciembre de 2010

El caballo de Atila

Retrato de Atila (406-453), tomado de internet sin ánimo de lucro


El caballo de Atila

Una mentira encadenada

Se acusan de mentir
los unos a los otros,
los otros a los unos.

Pero yo veo en todos ellos
al caballo de Atila, del que dicen
que llevaba en las herraduras
el exterminio de la hierba.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Estampa hogareña

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro


Estampa hogareña

Ahora que la religión católica-apostólica-romana está de capa caída en España, donde tiene apóstoles para su acoso y derribo, levantamos un templo católico-apostólico-romano en la ciudad española de Barcelona. Y ahora que la familia tradicional esta siendo desgarrada por el virus del nihilismo, y también por algunos políticos de convicciones superficiales, ligeras y evanescentes, la declaramos oficialmente Sagrada y le erigimos un templo en la ciudad española de Barcelona.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Ser de todos lo que es mío


Tomado de internet sin ánimo de lucro

Ser de todos lo que es mío

Poner paz en tanta guerra,
calor donde hay tanto frío,
ser de todos lo que es mío,
plantar un cielo en la tierra.

(Himno de la Liturgia de las Horas, fragmento)

Por mentira que parezca, el cuartero anterior puede quedar resumido perfectamente en el verso tercero. Nada tiene de extraño, cuando sabemos que los Diez Mandamientos se encierran en dos. ¿O debo decir se encerraban?

sábado, 11 de diciembre de 2010

Un perro en Navidad

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro

Un perro en Navidad

Este poema ha sido recuperado de la memoria y rehecho con pretensión de fidelidad. No obstante, han pasado por él más de 40 navidades y seguro que tiene algún gazapo entre sus versos, sencillos y claros. Se lo mandé a mi familia a modo de posdata de una carta en la que les comunicaba que no podría ir a pasar las Navidades con ellos. Era el año 1966 o 1967, no puedo precisar exactamente. Yo estaba en Madrid, estudiando, pero a veces me ataban las chapuzas laborales que me salían y que, al margen de otras ayudas inestimables, necesitaba para sobrevivir. Creo que en aquellos días trabajaba por horas en la imprenta de la resvista SP, del falangista Rodrigo Royo, con mi amigo del alma y compañero de colegio en La Virgen del Camino, José Luís Fernández Martínez, antes de fundar el Grupo Coral Tak, que fundamos juntos, pero no solos; antes, por tanto, de ser José Luís Zamanillo, como se llamó a partir de entonces, como aún se llama ahora.

sábado, 4 de diciembre de 2010

Conciertos de invierno: “50 años” del Dúo Dinámico


El Dúo Dinámico en concierto

Conciertos de invierno: “50 años” del Dúo Dinámico

Hace un poco más de tres años se estrenaba en el Teatro Apolo de Madrid el musical “Quisiera ser”. En principio, parecía que éste iba a ser el broche de oro con el que el Dúo Dinámico cerraría su dilatado y glorioso transitar por los bellos, aunque a veces escabrosos, territorios de la música. Pero no ha sido así, con la celebración del  concierto “50 años” se han abierto las puertas a nuevos escenarios, nuevos hitos, nuevas conquistas.

Y es que el Dúo Dinámico ha vuelto a instalarse en el proscenio de su famosa canción “Resistiré”, utilizada por Almodóvar en la escena final de la película Átame, y ha pasado de nuevo el rubicón de los años, de las generaciones, de la competencia constante y desaforada. De nada ha valido que su compañía discográfica EMI sacara en el 2004 una recopilación supuestamente “definitiva”, porque ella misma se contradijo sacando otra colección en el 2005. De nada ha valido que el Musical “Quisiera ser”, estrenado en el 2007,  fuera entendido por todos como la apoteosis final a una larga carrera marcada por el éxito. Es verdad que ha sido un broche de oro, como decíamos al principio, pero no un broche de cierre, sino de suma y sigue, como ha podido verse después.

De nada han valido tampoco los contratiempos de la enfermedad, que los ha habido, porque han sido felizmente superados. Ni siquiera la crisis económica, que tanto ha reducido las actuaciones de nuestros cantantes y grupos musicales por los pueblos y ciudades de España, ha sido suficiente para arrojar a Manolo y Ramón de este olimpo musical en el que están instalados desde hace “50 años” por la soberana voluntad de la gente, que es en definitiva quien paga las entradas de sus multitudinarios conciertos y quien los aplaude a rabiar en el transcurso de los mismos. Parodiando a Lope de Vega, podríamos decir que quien lo ha visto lo sabe y puede dar testimonio.

La celebración de estos “50 años” musicales, en los que ha corrido y corre el caudal de la emoción, del recuerdo y del reconocimiento,  ha vuelto a insuflarles la íntima energía de la juventud, aquella juventud que en una de sus canciones más emblemáticas, “Somos jóvenes”, anunciaban que perduraría mientras alguien quisiera cantar…Canción ciertamente premonitoria, porque somos incontables los que, con independencia de los años,  queremos seguir cantando sus melodiosas canciones y, sobre todo,  que ellos nos las canten desde la madurez y perfección que han alcanzado sus voces, sus músicos, su escenificación, sus arreglos, sus instrumentaciones, su saber estar con el público de una manera sencilla, próxima, íntima, cálida y llana.

Como español y como amante de la música, yo me siento orgulloso de esta pareja incombustible que durante “50 años” ha desplegado sus canciones por dentro y por fuera de nuestras fronteras. Y me alegra que en esta celebración gozosamente dorada, a la que llegan sólo unos pocos privilegiados,  nos puedan ofrecer  unas cuantas actuaciones de invierno, es decir, actuaciones que tienen lugar en locales cerrados, en los que forzosamente el aforo es mucho más reducido que en las plazas de toros o en los recintos al aire libre habilitados “ad hoc” por los ayuntamientos. Teatros, auditorios, lugares recoletos que a veces son mágicos y siempre distinguidos, tanto por la arquitectura que los adorna como por la solera que los recubre o la calidad de los artistas que pisan sus tablas e impregnan el espacio con su arte. Léase el Teatro Laboral de Gijón (el pasado día 1 de diciembre), el Teatro Principal de Alicante (hoy mismo, día 4), el Palau de la Música de Barcelona (el próximo día 10), o L’Auditori de Barcelona el (próximo día 16). Por cierto, las localidades se agotan con asombrosa facilidad, lo que viene a corroborar en cifras lo mucho que los quiere la gente. En Barcelona ya están agotadas.

Felicidades a Manolo y Ramón, que son el Dúo Dinámico, y felicidades a todos los miembros de su equipo, que son un soporte inestimable. El éxito lo doy por descontado.

Mariano Estrada www.mestrada.net Paisajes Literarios

sábado, 27 de noviembre de 2010

¡Qué pena!, a Manuel Centeno

Cercado de mies, fotografía de Fernando Medrano

Nueva dedicatoria a Manuel Centeno, 7 de mayo de 2013

El 27 de noviembre de 2010 dediqué este poema a mi amigo Manuel Centeno, con quien entonaba gorigoris porque el campo moría. Hoy el que ha muerto es él y mi corazón entona un canto de tristeza.

¡Qué pena!

Este post se lo dedico a mi compañero y amigo Manuel Centeno, que en estas cosas del campo tiene unos sentimientos como los míos: las mismas penas, las mismas alegrías. Desgraciadamente, el campo que él y yo conocemos tiene hoy más de las primeras que de las segundas.
Querido Manuel: ¿Podrá olvidar el campo alguien que se apellida Centeno?

martes, 23 de noviembre de 2010

Una noche de amor

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro

No es posible tener
una noche mejor
ni beber de unos labios
tantas copas de amor.

Son las copas de amor 
que en tu boca bebí, 
porque tú me las dabas 
en un beso sin fin.

Una noche de amor

Nunca he visto a nadie tan impresionado por un vestido rojo como el camarero que, antes de aquella cena íntima e inolvidable, nos sirvió dos martinis secos en la barra del bar. Es verdad que ella era más guapa que ninguna de cuantas habían contemplado sus ojos hasta entonces, y que su fulgurante aparición le pilló un tanto en la inopia. El hombre me había visto allí solo tanto tiempo que le vino a dar lástima de mí. De hecho, empezó a mirarme a hurtadillas y con cara de rumiar en sus adentros: “este panoli…”
-¿Puede darme fuego? –le dije, aprovechando una de esas miradas compasivas.
-Pues claro, muchacho –respondió-. ¿Esperas a alguien?
-Sí, a una chica.

viernes, 19 de noviembre de 2010

El perdón

Foto de 1972

El perdón

Has llegado sin ruido a mi conciencia
y he intuido una paz
que todavía no merezco.

martes, 16 de noviembre de 2010

Al amor por el mar

El Charco, Villajoyosa. Foto Mariano Estrada

Al amor por el mar
El Charco, Villajoyosa

Consciente de ser hombre,
he mirado el azul
catártico del mar
y en las paredes palpitantes
de la respiración -en las que el aire
penetra y se transforma-,
he sentido la vida.

viernes, 12 de noviembre de 2010

La mano tierna

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro


La mano tierna

Más allá de la carne,
que me llevó a las mieles
profusas del deseo.

Más allá del deseo,
cuya sacralidad
-comúnmente aceptada-,
devino en rutinario
rearme de la artillería.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Epitalamio

Rosa y Mariano, Villajoyosa, 13 de septiembre de 1975


Epitalamio

Para que el beso se hunda en los
toneles más hondos de la sangre,
el dios exige a la vida
este sagrado holocausto.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Amanecer

Amanecer en el Montiboli, Villajoyosa. Foto M. Estrada

Amanecer
Montiboli, Villajoyosa

Amanece en los íntimos
alrededores de la casa,
donde la luz mantiene aún
un combate de espadas con la noche.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Lucubraciones micológicas


Macrolepiota procera. Foto de JMPiña

Lucubraciones micológicas

No hace muchos años, en la Comarca de Sanabria-La Carballeda (En Cuenca no lo sé) sólo se cogía un tipo de seta: el cucurril o cucumillo (Macrolepiota procera) Y únicamente para el consumo personal o familiar. En la actualidad, el de las setas es un negocio floreciente, aunque hay años en los que la sequía lo deja completamente mustio. Por lo que he podido saber, éste del 2010 no está siendo un año muy bueno. En cuanto a las variedades, que son muchas, las más solicitadas y abundantes son, además del cucumillo: el boletus, el champiñón y el níscalo.

Entre las setas no comestibles, abundan los “pedos de lobo” (Geastrum, Lycoperdum, Calvatia, )… que en algunos lugares reciben el nombre de cacaforras… Por cierto, nunca he tenido claro si los lobos, cuando bufan por la retaguardia, espolvorean. Pero si no lo hacen, ¿a santo de qué ese nombre? Por lo que a mí se refiere, prefiero llamarlas cacaforras, porque es un nombre sonoro y porque así se llamaban cuando yo jugaba con ellas de niño. ¿Has dicho jugaba? Sí, son como pequeños balones de fútbol que, al irles danto patadas por prados y praderas, explotan y se derraman en un polvo marrón (esporas) que, a lo que parece, tiene ciertas analogías con los pedos reales de los lobos. Y digo yo: además de aire, ¿qué otra cosa llevan los pedos de los lobos para que puedan ser detectados por el ojo humano? ¿Alguien ha visto alguna vez un pedo real de lobo?


 
Macrolepiota procera. En Muelas, cucurril o cucumillo

Lucubraciones micológicas

A los frutos de monte se les llama también frutos incultos, porque acaso no han pasado por la universidad. En el monte de mi abuela, que ahora es patrimonio forestal del Estado, repoblaciones en consorcio, había un guindo silvestre. ¿Es lo mismo que inculto? Tal vez. ¿Y lo mismo que santo? Puede. San Silvestre, santo de nochevieja. O mejor aún, de cierre por defunción. ¿Reencarnación, retorno? ¿Morir para nacer? ¿Fin y principio? ¿Giro o espiral? Pero “no basta ser el último para ser alguna vez el primero”. De manera que es el santo del fin, supongo que “Desde aquí a la eternidad”. Mi abuela, la del guindo en el huerto, solía decirlo muy claro: “San Silvestre, con el año acabeste”. Es decir, inculto por donde quiera que se le mire. Hay que ver las cosas que se hacían antiguamente para rimar....

Sobre los frutos silvestres ha caído un sambenito muy chungo: el de lo no recomendable “por reconocida inutilidad de la lógica”. Y esto es así hasta el punto de que la palabra silvestre, que encierra en sí misma la pureza de las vírgenes troyanas y la hermosura de las flores en primavera, tiene también determinadas significaciones peyorativas, como inculta, agreste, selvática, no sé si un poco salvaje. Las generalizaciones pueden ser trampas de las que es difícil salir. Pero nosotros sabemos que un garbanzo no estropea nunca el cocido. Entonces, ¿por qué razón un abruño, si es un fruto mediocre, incluso malo, va a negar las bondades de una seta, que todo el mundo sabe que es buena? El boletus, por ejemplo, que es silvestre e inculto ¿no es exactamente magnífico? Hombre, la exactitud alude a la precisión; en cambio, la magnificencia se refiere a la calidad, que es exactamente magnífica, tal como queríamos rebatir. ¿Para qué quedarse entonces con los engendros desnaturalizados, los ciruelos bordes, los escaramujos inútiles, las higueras malditas y los frutales sin injertar, ya sean manzanos, abruños o bergamotos?

- Champiñones, boletus, níscalos, cucumillos... Es cierto que las setas son delicias de monte, Antonio, pero no es menos verdad que su tipismo silvestre se destiñe en la cocina de los restaurantes, donde las manos de los cocineros las convierten en manjares de salón, es decir, modales refinados, precios consecuentes, sofisticadas vestiduras. ¿Me corre usted la silla, por favor? ¡Será finolis! Maravillas de España. Torcas. Morteruelos de Cuenca. ¿Quién no cede al encanto de unas setas colgantes, hechas arte y cultura al lado de un Museo, en buena compañía, delante de un buen vino? Por el contrario, a la tortilla de patata o al chorizo carballés les va muy bien el murmullo del agua en el arroyo, el liquen de las peñas, el mendrugo de pan, los olores fuertes del brezo...

Del libro Aguablanca: caminos de ida y vuelta (2002)

Mariano Estrada 

domingo, 31 de octubre de 2010

Lunas de ceniza

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro


Fluye de lumbres recordadas
un sahumerio de amor, un vaho
dulce que brota en la ceniza.

Lunas de ceniza

Habito el corazón
de este boscaje denso
que, a la hora del frío y de la muerte,
depone sobre mí
sus alamares rojos.

Por el calvero de las ramas
desciende una gavilla cenital
de sables infinitos
que inundan de color
el horizonte oscuro de la leña.

Y miro hacia esa luz de amanecida
que, al dorso del ocaso,
ha vertido la paz
en los regueros de la sangre.

Las hojas caen como
lenguas lentísimas de otoño,
y dejan en el barro
sus auroras de luz, sus altas
lunas de incendio y de ceniza.

Mariano Estrada. Del libro Hojas lentas de otoño (1997)

jueves, 28 de octubre de 2010

Gotas de hielo

Fotografía tomada de internet sin ánimo de lucro


Gotas de hielo

Soy un agua apresada en el dolor,
un hombre con el llanto suspendido.

No hay nada en apariencia
que me impida llorar, pero no lloro.
Y, sin embargo, cuánto
me gustaría desahogarme, cómo
se acurruca mi corazón
en esta esquina íntima
de oscuridad y desconsuelo.

Cuántos abrazos enterrados
en esta alfombra seca, en este
rincón de pena amontonada.
Cuántos besos cubiertos
por esta grieta extensa
de sequía y de limo.
Cuánto amor sumergido bajo el polvo
en que se ha convertido esta derrota.

Me siento un hombre vano,
que no sabe qué hacer
ni a dónde ir ni cómo administrar
este dolor sin asidero
ni precedente, casi
ya sin remedio ni templanza.

Tras esta noche oscura,
de fríos y apretados nubarrones,
las gotas de dolor
que arroje sobre mí
una nube de llanto incontenible,
no harán charco en mi vida,
pues mi vida está llena del vacío
que ha dejado el amor
al convertirse en hielo.

Mariano Estrada
Del libro Gotas de hielo (2011)

martes, 26 de octubre de 2010

Otoño

Álamos en Quintanilla de Justel. Foto JMPiña

Otoño

Acaso por ausencia de meditación, o tal vez por asociación inconsciente con el tiempo luctuoso de los difuntos -entre los que tengo muy cercana familia-, siempre había creído que el otoño era una magnífica metáfora de la muerte. Y, en efecto, el vientre de las Horas se derrama en un color de tierra, el día es gris, la lluvia minuciosa, la tarde adquiere texturas de frescor, de oscuridad, de melancolía... Y las hojas caen, finalmente, aunque antes revisten de belleza la inminente desnudez de los árboles.

viernes, 22 de octubre de 2010

Lluvia

Fotografíia de Gustavo Miranda

Ver el PPS de Mar:

Ver el PPS de Victoria Vasilof:


Lluvia

Esta lágrima extensa
que ha colgado la lluvia en el paisaje,
no es ya rezumo del dolor, es riego
lento que abraza la ceniza.

Este pálido gris, este
cuerpo de luz convaleciente,
ha dejado en sus íntimos cedazos
pretéritos granzones de tristeza.

Esta linfa del tiempo
ha devuelto al presente el bienhadado
color de la fertilidad
-que es un tono del agua y de la tierra-,
y ha binado en mis ojos
un reguero de vida, un hondo
cauce de sangre y de esperanza.

Y yo recibo el vaho de esta nube
como un beso de madre, un alba
que contiene la luz y la memoria.

Del libro "Poemas huérfanos"

Río Fontirín, Muelas de los Caballeros. Foto JM Piña


Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
Blog http://paisajes.blogcindario.com/

miércoles, 20 de octubre de 2010

La caricia

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro

La caricia

Desde hace muchos años
he tejido mis noches
con el hilo tenaz
de la ilusión y la esperanza.

Pero la luz de cada día
-que es de materia insobornable-,
le da tal claridad a la mañana
que todos los castillos
levantados se desvanecen.

sábado, 16 de octubre de 2010

Tristeza

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro

Tristeza

No me dejes aquí,
en esta noche larga,
que ha llenado mis ojos
de oscuridad, de frío, de intemperie.

jueves, 14 de octubre de 2010

Quiero volver a ese mar

Fotografía de Fernando Medrano


Quiero volver a ese mar


Yo tengo toda mi pena
en esta playa de arena,
en este mar de color.

Donde tus pies anduvieron,
cuando tus ojos me hirieron
para llenarme de amor.

Y para andar,
quiero volver a ese mar.

Recuperar el momento
en que tu amor, como el viento,
bebía de este lagar.

Quiero volver a ese mar.

Y prolongar el sendero
de aquel amor prisionero
de tu forma de mirar.

Y caminar,
 y caminar…

Ganar el acantilado
del que me vi despeñado
por un oscuro cantar.

Con otra voz.
Hacia otro mar.

El cantar de una sirena
que me dejó en esta pena
que yo pretendo enterrar.

De la serie “Poe-canciones”
Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios

lunes, 11 de octubre de 2010

¿Cómo puedo cantar?

...la extensión interminable del salón, la luz escasa, el frio insoportable de la casa...

¿Cómo puedo cantar?

             Poe-canción atribulada


¿Cómo cantarte una canción,
con tanta decepción
como he sufrido?

Todo recuerda que te has ido:
la cama, la extensión
interminable del salón,
la luz escasa,
el frío insoportable de la casa.

Tú eres la leña sin quemar,
estás en todas partes sin estar
y mi dolor no pasa.

¿Cómo puedo cantar?

¿Cómo puedo cantar, si la cabeza
me duele de locura y de tristeza?

Porque es de locos verte sin parar,
de lugar en lugar:
en la boca del metro,
en la orilla del mar,
en la barra alargada de algún bar...

Que si estás, como Dios, multiplicada,
tan sólo es en mi frente enamorada:
que vive sin vivir,
que muere de esperar,
que vierte con dolor
este llanto de amor
que ahoga a una canción sin empezar.

¿Cómo puedo cantar?
¿Cómo puedo cantar?
¿Cómo puedo cantarte una canción?

De la serie “Poe-canciones”

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
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domingo, 10 de octubre de 2010

La resistencia




Fotos tomadas de internet sin ánimo de lucro
  



















La resistencia

Ayer,
mientras llegaba el ascensor,
me dijo mi mujer:
No puede ser, mi amor,
tanto comer, tanto beber...
eres algo mayor,
¿has ido ya al doctor?

Y yo dije que sí, que sí,
que sí, que sí, que sí, que sí...
Y así se complació y
 me complací.

¿Y qué te recetó?
-dijo con ciertos aspavientos-
Pero yo no perdí la compostura
y respondí:

Cordura,
o sea, precaución.
Y aparte de unos diez medicamentos,
nombró determinados alimentos,
que se encierran en dos:
el bueno la verdura,
el malo el salchichón.

¿Y el feo?
Ése, digámoslo en hip-hop:

Pescado sí, chorizo no,
tortilla a la francesa,
espárragos y col.

No fumes plus, no bebas more,
olvida los mariscos
que dan colesterol.

Como saben los viejos
las grasas y los dulces, lejos.
Las tentaciones, fuera…

¿Y  la ternera?

¡A la basura! -dijo el cura-
tan sólo por comer de la asadura.

Consuélate con te,
con te, con te, con te, con te...
Convéncete con te,
con te, con te, con te, con te...

Mujer,
pero a la hora de comer
¿ni un vinito de Rueda?

Ni medio tan siquiera.
La dieta es un deber
que no puede saltarse a la torera.
Ya me tienes a mí
aquí, aquí,
aquí, aquí, aquí...
para apoyarte en lo que fuera
o fuese menester.

Adiós doctor,
-le dije a mi mujer,
mientras dejaba el ascensor-
Y, ardiendo de placer,
corrí hacia la nevera...

En la nevera había,
desde la hora del almuerzo,
vino tinto del Bierzo,
una cerveza fría,
un cava de primera
y un espléndido queso de Castuera.

Después un whisky doble
logró que me sintiera
tan fuerte como un roble.

¿Café, señor?
Pues sí, feliz idea.

A cierta edad, doctor,
la contención es buena,
y su consejo noble.
Pero una noche loca
¿a quién le viene mal
para endulzar la boca?

Y tras cenar
calamos en un bar
de gran ambiente,
había mucha marcha, buena gente
incluso alguna diosa
de carne elemental, ornamental,
sublime, fulgurante, escandalosa.
¿Escandalosa, pibe?
No pares, sigue, sigue,
no pares, sigue, sigue…

Y yo me vi capaz
de cualquier cosa:
amar, querer...
emborracharme de placer
y contemplar la rosa.

Mariano Estrada www.mestrada.net Paisajes Literarios

lunes, 4 de octubre de 2010

El rincón elegido

Villajoyosa, entre el Montiboli y en Charco. Foto Mariano Estrada

El rincón elegido

¿El futuro? No sé,
tampoco quiero nada
que no se encuentre en este
trozo de mar delimitado
por el campo de luz de las pupilas,
en este espacio mínimo
de tierra, en el que caben
los sueños, el dolor, las rosas.

sábado, 2 de octubre de 2010

Alma de noche

 Fotografía de 1973, recién llegado a Villajoyosa, en el barco de Miguel Ángel Martínez
                            


Alma de noche
Montiboli, Villajoyosa


Salen los barcos a la mar,
como pelillos
de vieja discusión
que dejan en el aire
una ruidosa sinfonía:
run, run, run, run…

“A la mar que te vayas,
querido Pepe”...

¿Sales a despedirme, Ausentia,
o es que te gusta este vaivén
de madrugada, este runrún
de barcos al trantrán?

En menos de dos horas
saldrá también el sol
y, con el sol, los cuernos
parsimoniosos de los caracoles,
los cantos de los gallos, las sensibles
antenas de las mariposas,
las primeras toallas
de los turistas…

Luego sale la prensa
de papel: ra-ta-ta-ta-tá…
que inunda los kioscos
de información,
de anuncios, de cotilla,
de teléfonos de contacto…

Sale el tren, sale el autobús,
sale la gente de sus camas,
de sus casas, de los panales
de miel de sus colmenas,
de la boca del metro,
de las rampas de los garajes,
del orujo del bar…

Salen nuevos iconos
en las televisiones
nacionales, locales, autonómicas,
públicas o privadas.
Y sale Ana Obregón, cuya vitola
de biología arborescente,
huele a gastada primavera.

Y ya, como esperanza colectiva,
salen los números premiados
de la loto de Cataluña,
salen los ciegos, las quinielas,
sale la lotería nacional,
sale aquello y aquello…

Y así, sale que sale,
todo sale for sale.
¿Comprende usted?
Si no sale, no vende, pero, entonces,
¿de qué trata la trata?

¿Estás a la que sale, a la que salta,
a la que vende o a la que te meto?

Mi estado es tuyo, hermano, pero tú
¿Cuándo saldrás de esa salmodia,
en la que siempre estás salido,
si bien se mira?

Sal, ido,
si bien se mira.

Sal de una vez, si quieres.
De Santa Pola.
En El Saler, pimienta.

Y del armario, sales
gordas de frutas. Vamos,
si es que te sale del salero,
que lo tienes, y mucho.
En las viejas salinas
de Guardamar.

Huelo el alba, los barcos
se alejan al trantrán.
Me gusta este runrún mientras me duermo.

Del libro “Las orillas del mar”
Agosto, 2008

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
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Poemas recreados: http://groups.google.com/group/paisajes-literarios

viernes, 24 de septiembre de 2010

Caminos, silencios, ríos, montañas


 
Río Fontirín, Muelas de los Caballeros, Zamora. Agosto 2010

Caminos, silencios, ríos, montañas...

El silencio volvió a apoderarse del camino. Otra vez los pasos acompasados y monótonos, la ensimismación, la introspección, la actividad desenfrenada de la mente, los pensamientos que vienen, que van, que se amontonan, que juntan el grano con la paja, la verdad con la mentira, que burlan el tiempo y el espacio, que trascienden la realidad, que quiebran la razón y las costumbres, que irrumpen en territorios inexplorados y traspasan murallas imposibles. Que transforman y desmenuzan y desacralizan. Que atraviesan montañas, que saltan valles y ríos......

¿Y ahora descubres que el río no es el río sino una grieta de sangre? ¿Y ahora descubres que las montañas son senos de la mujer/madre-tierra/fecundidad? Ayer profundicé una montaña desnuda y afeitada. Las montañas también tienen afeites, como las mujeres. Los tienen y los sufren y los exhiben. Como adicto a la trigonometría, yo pedía senos. Y me dieron tangentes. La tangencias son igual que los roces. Pero yo necesitaba profundidad. Y me dieron piedras. En realidad, yo era un niño "que iba para piedra nocturna". Mamá, quero senos. "Voglio una donna" Y me dieron montes para andar y merecer y ganar altura y cansancio. Ahí está el bidón de la pulsión, el de las cuestas arriba. ¿Cómo se profundiza una montaña? Propulsión a chorro. A mí me empujan motores que funcionan con queroseno. Mamá, quero seno. Mamá, quero tuate. Seno y chocolate. Y me dieron piedras.

Subiendo a las cascadas de Sotillos, San Ciprián, Sanabria, Zamora


En las laderas afeitadas las piedras van hacia arriba, pero también hacia abajo. Solo hay que mirar al revés. Variar el sentido. Invertir. Meter muchos millones en la prosperidad, léase mercantilismo, léase progreso: "Millones al horno". Invertirse. Hacerse maricón. Volver la vista. Hacerse estatua de sal, mirar atrás. La mujeres que hacen el pino son temporalmente invertidas. ¿Y si se invierten dos veces? Entonces pueden ser lesbianas. Mi tío Juan me ha dicho que su hija Teremari está muy bien invertida. De pie es un monumento, pero él quiso decir colocada. No, no, chaval, mi hija es de la liga antidroga. No sé qué liga es esa, pero no es muslim, como la Árabe. La liga árabe es difícil de ver, porque está debajo del burka. Las ligas ya no están en el muslo, como antaño. Ahora son sociedades elásticas. A algunas sociedades les viene grande la liga. ¿Qué ocurre, entonces? Que todo cristo las folla.

Las montañas no tienen profundidad, tienen altura. Y base. En las montañas nevadas la base es militar. Área militar. Base por mitad de la altura. ¿Triángulo? No, cono. Bien, ¿quiere usted una cana? ¿Al aire? No, de barril. Una cana, cono. El cono es un volumen. La cona es otra cosa, pero en gallego. ¿Me está invitando usted a una cerveza? Base. Ácido más base. Sal más agua. Sal de la tierra, sal de la marisma, sal de Santa Pola, sal de aquí, lárgate ya, vete. "Yo te arrojé de mi cuerpo... ". Las montañas con base militar son montañas nevadas. Los montes afeitados no son montes, son piedras. Piedras de Venus. No son metáforas. Son huesos. Axis y coxis. Las piedras de Venus aparecen cuando las mujeres se hacen niñas de pubis. Es decir, se afeitan. ¿Tú te afeitas? "Mi barba tiene tres pelos". El pubis es un entorno atrayente, incluso obsesivo y mortificante. El pubis atrae a las ladillas y a los pitones. El de los ángeles atrajo a Manuel Puig.

Gonorrea de toros. Sangre de cornada. El río es una grieta de leche. Montaña de penetración. Profundidad. Útero. Los toros acaban siendo afeitados para que los cuernos no arruinen las corridas de los empresarios taurinos, cifradas en moneda corriente, como el agua que no has de beber. Los cuernos de ahora son un patrimonio confuso. No quemado, confuso. Un colosal mixtifori. Antes los llevaban las esposas. Ahora los llevan los carceleros entre sí. Las esposas van sueltas hacia los presos, con la tortilla y el bollo. No obstante, yo persigo la luz de las cavernas y ayer profundicé una montaña desnuda y afeitada. Antes fue un bosque de robles. Pero la tierra se estremeció con las caricias candentes del verano que desembocaron en tormentosos desgarramientos de la carne.

Heme aquí, carne atribulada, monte arriba, piedras arriba, "Peñas Arriba". Hacia la cumbre, hacia el pezón redondeado y trémulo, hacia el solar mortificado de la nieve, que se derrite; del agua, que se filtra; de la fuente, que brota en la ladera para hacerse río de sangre y eternidad, río de flora esplendorosa, río de fertilidades multiplicadas, río de belleza, río de gacelas atardecidas, río de baños ateridos y venturosos, río de molinos y amaneceres blancos y crecidas y sones y cánticos y transparencias.

Flora no afeitada, flora exuberante y floreciente. Río cercano y entrañable, río del alma que arrastra chorros de vida y bardomera hacia un ocaso de mar y corazones lentos, con mareas de vientre y de ternura. Río de sueños y de amor y de espumas evanescentes y populosas. Río de corrientes atropelladas y de truchas escurridizas. Río de barbos y de carrizos, que son barbas de río. Río elemental. Agua sin espasmos de contaminación, agua de abluciones purificadoras, agua de catarsis, borbotón, agua viva, agua constante, agua constantemente viva...

Del libro "Aguablanca: caminos de ida y vuelta"
Río Fontirín, Muelas de los Caballeros. Agosto 2010

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios

sábado, 18 de septiembre de 2010

Vientos de soledad


Montiboli, Villajoyosa, día de viento. Vista desde casa. Foto M. Estrada

 
Vientos de soledad, poema que dio título a un libro
 
 Éste es el poema que le da el título al libro “Vientos de soledad”. Fue Accésit en el Premio de la Poesía Festa D’Elx, en 1984. O sea que debí escribirlo a principios de los 80. 


Vientos de soledad


Me despierta el aire,
me despierta el viento,
todas las mañanas
y a cada momento.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Fecundidad

Río Fontirín, Muelas de los Caballeros, Zamora. Foto M. Estrada

Fecundidad

El río baja de golpe,
la tierra calma lo espera.
Hay un lugar donde se unen
para que nazca la yerba.

domingo, 15 de agosto de 2010

La parva

Una bielda, un manal y una tornadera, casa familiar, Muelas de los Caballeros

LA PARVA (Ver nota, al final)

Enhiesta sobre la era,
la parva espera.
No hay viento.

El sol aprieta.

Debajo de la carreta
está extendido el almuerzo.

viernes, 13 de agosto de 2010

Morir o amarte

Rosa, en sus años jóvenes, ante el Puerto de Villajoyosa

Morir o amarte

Aunque las puertas se cierren
yo pasaré por tu calle.
Los ojos que me vigilan
no son de nadie.

martes, 10 de agosto de 2010

El hijo


Rosa y Patricia, julio 1978


EL HIJO

Tengo una vaca entelada,
tengo la mies en la tierra;
ayer tuvimos un hijo
y mi mujer está enferma.

sábado, 7 de agosto de 2010

Embestidas, mordiscos y picaduras

Rosa, en la huerta.  Muelas de los Caballeros


Embestidas, mordiscos y picaduras

A Rosa,
en cuya sangre se ceban los mosquitos.

Mira una vaca ¡qué susto!
¡qué miedo, mira una víbora!
Decidme, sustos y miedos:
¿quién desplumó a las gallinas?

martes, 3 de agosto de 2010

Iniciación

Villajoyosa, entre las playas Charco y Caleta

Iniciación

Del libro Las orillas del mar (2013)

1

De forma imperceptible
-y hasta puede que involuntaria-,
dejo a un lado el camino
por el que voy todos los días
al encuentro gozoso con el mar.

jueves, 29 de julio de 2010

La siega del pan

Foto de los últimos años 60, tomada en la tierra de "La Fragua", Muelas de los Caballeros (Zamora)
 


LA SIEGA DEL PAN

A Tere, con quien he compartido la hoz.
A Charo, que puso siempre la risa.

En los carrascos del teso,
que abundan en abuyacas,
tienen su vasto concierto
las chicharras.

Abajo, junto a los chopos,
está el concierto del agua.
Entre los dos, la pendiente
con una alfombra de paja:
paja de trigo o centeno
paja de avena o cebada.

El sol que dora la espiga,
bruñe, castiga y aplana.

Por la ladera, esparcidos,
sombreros, hoces y agallas.
cinco cuadrillas de a seis,
treinta camisas sudadas.
Cuatro las sudan las hoces,
una engavilla, otra ata.
Sesenta surcos de a hecho,
tres caballones por barba.

Sólo al final de la mano
se abre un procinto de calma;
hay quien lo adoba con vino,
hay quien lo riega con agua.
Bien se merecen un trago
la hoz, el lomo y la paja.

¡Que haya salud!, grita el aire
desde una cemba rayana.

Lo mismo digo: ¡que la haya!
Que haya salud, que haya vino,
que haya paciencia y baraja.

Por las roderas del viento
corre una brisa que canta;
un segador le ha prestado
la voz, el fuelle y el alma.
¡Que bien parece esa copla
sobre este son de chicharras!
De las choperas del valle
sube el graznar de una urraca.

-Ya estamos todos, hermanos.
-A ver si vienen las viandas.

Del mediodía al ocaso
hay una cuesta empinada;
la tarde es todo largueza,
la noche es todo tardanza;
la tierra toda manojos
que tras el sol se embornalan.

Y cuando se abre la luna
es todo prisa, no pausa.
Prisa en los ojos que miran,
prisa en el tiempo, que pasa;
prisa en la estrella que cae,
prisa en el gallo que canta.

El día empieza de nuevo.
nadie es más gallo que el alba.


Mariano Estrada
Del libro Trozos de cazuela compartida (1991)

jueves, 22 de julio de 2010

El gorrión desprendido



Torre de la Iglesia de Muelas de los Caballeros

Gorrión, de los que abundan en Muelas

EL GORRIÓN DESPRENDIDO

Para Guillermo (1), que tiene patria
en Muelas, con los pájaros.

Fue en el lapso de tiempo que va de un sol pajizo y declinante a la hora imprecisa de los murciélagos. En lógica correspondencia, las pizarras azules de los tejados y los sillares grises de los edificios tenían sombra en el este, matizando así la uniformidad machacona de los colores.

sábado, 17 de julio de 2010

El beso

Iker Casillas y Sara Carbonero. Foto tomada de internet sin ánimo de lucro

El beso


Es verdad que no supe
reconocer entre los otros
ese beso que siempre se recuerda.

Lo reconozco ahora,
muchos años después
de haberlo abandonado:
en el banco de un parque,
en las afueras solitarias
de la ciudad,
en la penumbra artificiosa
de las cafeterías...

Como otras muchas noches,
he soñado con él
y tengo que decir que aún me conmueve.

Del libro "Amores colaterales"

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
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Poemas recreados: http://groups.google.com/group/paisajes-literarios

martes, 13 de julio de 2010

Hoy es el cumple de Patricia

Patricia en la Playa de la Caleta (Minarete), en Villajoyosa. La que mira por la ventana es Rosa

Patricia en el Trestellador (Benimantell)


Hoy es el cumple de Patricia.



En el año 2007 le escribí una larga carta (1), ya que entonces vivía en Alcoy. Cuando vivía en Valencia le escribí una carta más larga. Y cuando estaba en Dublín, le escribí prácticamente una novela. Se ve que el tamaño es función de la distancia. Pero ahora vuelve a vivir en Villajoyosa y, además, hoy viene a comer a casa, con nosotros. De manera que la abrazaremos, la besaremos, la felicitaremos en persona y desfrutaremos de su cara, de sus ojos, de sus gestos, de su voz, de sus palabras, de su risa contagiosa y divina.

Tengo que decir que Patricia no sólo ocupa un lugar en el espacio, sino que ella misma es el espacio y lo ocupa todo, a pesar de que su habitación esté vacía.

Querida Patricia: deseamos para ti muchas cosas, todas excelentes. Pero hay una que sobresale de las demás: que tengas una buena salud el resto de tu vida. Porque el resto de tu vida es largo, muy largo. Y es que en realidad estás empezando a vivir.

Pati: sabes que te queremos con el corazón, pero también con la cabeza.

Un beso

(1). Ésta es la carta, por si alguno la quiere leer:

http://paisajes.blogcindario.com/2007/07/00200-patricia-felicitacion-de-cumpleanos.html


Querida Patricia:

Es un día realmente precioso: no hay frío, no hay calor, el sol es brillantemente amable y hace un viento ligero y sugerente que es en sí mismo una caricia. Desde el lugar donde me encuentro, que tú conoces tan bien, miro hacia el mar y veo que tiene las crines erizadas ¿Es, pues, un caballo? No, tal vez una sirena que ha pasado esta noche por la peluquería… ¿Quién será el peluquero del mar que le ha dejado estos rizos de belleza?

Tú no estás aquí, pero yo te veo bajando la escalera entre dormida y descalza, cerrando un poco los ojos para apartar la luz, porque la luz es delatora y te recuerda que no has despertado todavía. De hecho, caminas con las manos por delante, esquivando las aristas de los muebles, como sonámbula que no quiere despertar. Te miro por detrás y descubro finalmente que el mar y tú tenéis algo en común: el mismo peluquero…Me pides que te deje despertar poquito a poco, porque la brusquedad no es conveniente para saborear con placer el desayuno…

Querida Patricia: ¿qué haces tú en Alcoy mientras el día se despereza en Villajoyosa? Que sepas que imaginamos tus pasos mientras vas del dormitorio al salón o a la cocina. No te estorba el sol porque en tu casa sólo da el sol por la tarde, no te estorba la luz porque tienes las cortinas echadas, no te estorban mis rondas mañaneras porque son emanaciones de la virtualidad. No te estorba nadie para que puedas despertar tranquilamente, abrir del todo los ojos, lavarte bien la cara, bajar a la calle sonriendo y desafiar valientemente al mundo: “aquí estoy yo, soy Patricia la Buena, la que se siente dispuesta a afrontar los desafíos a los que pueda someterme la vida, empezando por el toro con el que me toca lidiar esta tarde…” ¿Sabes a qué toro me refiero? Sí, te ha delatado la sonrisa…

De acuerdo, Patricia, esta tarde te toca trabajar y de eso no puedes escabullirte. Mañana tienes que ir a Valencia, pero el domingo, con el día despejado y la felicidad en la cara, te espera una celebración en el Minarete, casi encima del mar, detrás de las palmeras (no las salvajes, que ésas son las de Faulkner, sino las domesticadas), con la brisa del aire acondicionado y la belleza de este rincón que las Nereidas tienen prohibido visitar porque el dios es muy celoso y no quiere que se enamoren de los bañistas. Lo que el dios ignora es que ellas acuden a veces por la noche, como atestiguan las huellas que suelen dejar en la rocalla que queda justo en el medio de la caleta ¿Te sitúas? Yo me subía allí, a veces, a rastrear su perfume de mujer, o de diosa que quiere ser mujer…

Ahí te estaremos esperando algunos de los que te llevamos en el corazón: Rosa, Mariano, Daniel, Lisi, Raquel… Y, cómo no, Pablo, el que forma contigo una naranja completa. Otros quisieran estar, pero tendrán que conformarse con felicitarte por e-mail o con oír cómo te ríes por teléfono. Ellos saben bien que tienes una risa divina.

¿Y todo este exordio para qué? Pues mira, muchacha, sólo para decirte que te queremos. Que te queremos cantidad, más, si cabe, porque te toca estar sola en este día en el que deseamos que la felicidad te recorra por dentro.

Recibe el beso de todos

Y también el de un padre locatis de quien ya conoces de sobra las locuras

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
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sábado, 10 de julio de 2010

Un comentario sobre el Facebook

Foto tomada de internet sin ánimo de lucro


Un comentario sobre el Facebook


Se tiene la idea de que las redes sociales, entre las que el Facebook es de las más destacadas, son medios de comunicación que no se prestan mucho a la reflexión y a la calma, sino que tienen mucho de intrepidez y de superficialidad. Desde ese punto de vista, todo lo que allí se cuece, suele ser efímero. En realidad es efímero.

Sin embargo, sabemos perfectamente que las generalizaciones, siempre arriesgadas, suelen ser parcialmente injustas. Y en este caso no podía ser de otra forma.

Pues bien, yo utilizo el Facebook fundamentalmente para ayudarme a difundir la producción literaria, poética en una gran parte, que previamente cuelgo en algún blog. Y debo decir que, a pesar de que no etiqueto nunca, porque si lo haces, aparte de que comprometes a los demás,  te pasas todo el día recibiendo respuestas, tengo una notable cantidad de lectores, a juzgar por el número de comentarios.

Mi experiencia en Facebook, donde ya tengo andado mucho camino, arroja luces y sombras, pero en términos generales podría decir que no es mala, si bien no he utilizado esta herramienta como medio directo de publicación, sino como apoyo a lo que ya está publicado.

Últimamente, mezclados entre vínculos que conducen a textos más o menos extensos, estoy colgando algunos pensamientos sintetizados en pequeñas frases. Tales como ésta: ¿Y qué es la poesía, sino el don inestimable que nos permite seguir siendo inocentes? O esta otra: La medicina que mejor nos cura es la que damos a los demás. Frases que por su pequeña extensión, le van muy bien a este tipo de redes, según lo que hemos expuesto anteriormente.

El pasado día 9 de julio inserté la pequeña frase que dejo a continuación con los comentarios correspondientes, tal como allí se produjo. Es ésta:

En lo que soy ahora me duele lo que pude ser y no fui

Un abrazo

Y éstos fueron los comentarios:

María Jesús Ruíz Alonso: No creo que tengas que llorar por el ayer, hoy eres tú y punto. Creo que si antes surge todo ese poder igual no eras Mariano, igual no se podía llegar a ti.

Mar Martínez López: No es bueno lamentarse de lo que pudo ser y no fue, porque nunca sabremos si eso hubiese sido lo mejor. Deja que el tiempo transcurra y él te traerá aires nuevos, frescos que den otro sentido..... a SER!!!!!!

Mariano Estrada Vázquez: Vaya, veo que no se entiende bien esta frase, o no del todo. Es sólo una reflexión sobre las frustraciones, más o menos grandes, más o menos pequeñas, que todos tenemos. Asumo lo que soy, por supuesto, pero no estoy del todo conforme con ello, nunca lo he estado y posiblemente nunca lo estaré. En mi caso, la inconformidad es algo así como un modo de vida. Pero sin ninguna amargura. Las dolencias referidas son sólo pequeños pinchazos en el intelecto.
En lo que soy ahora (esencialmente tiempo y pensamiento) me duele lo que pude ser y no fui, pero me alegran otras cosas que quise ser y soy. Vaya lo uno por lo otro. No se puede tener todo en la vida.
Un abrazo, María Jesús. Un abrazo, Mar. Gracias por vuestra preocupación. Os lo digo con una alegre sonrisa.

Mar Martínez López: Pues nada, no sabes como me alegro, pero me reafirmo en una cosa, nunca sabremos si lo que quisimos ser, hubiera sido mejor.

Mirtha Munuera: siempre hay algún motivo en algún momento de nuestra vida...que lo pensamos...Gracias Mariano!

Mariano Estrada Vázquez: Claro, Mar, no podemos saberlo.
En cuanto a mí, no es que quisiera ser otra cosa, sino que hay sueños que no has podido alcanzar, deseos que no se han cumplido etc, etc., que posiblemente hubieran influido en lo que soy. Pues bien, esa parte es la que digo que me duele
Ejemplo: vas a un lugar al que no vas a volver y en el que hay 10 cosas interesantes para visitar, pero sólo puedes ver 8. Pues bien, siempre te pesará no haber visitado esas dos. El ejemplo quizás no es comparable, pero puede ser clarificador.

Mariano Estrada Vázquez: Hola, Mirtha: yo creo que hay más de un motivo y más de un momento ¿O es que no es normal tener frustraciones? ¿Y qué son las frustraciones sino cosas que pudimos ser y no fuimos? Pues eso es lo que vengo a decir: en lo que soy AHORA me duele lo que pude ser y no fui.

Mirtha Munuera: Claro que es normal tener frustraciones ! que levante la mano quien no? y que son? intentos mil intentos mil tabas mil tormentas...pero lo que mas duele creo... es no poder hacer lo que UNO SABE HACER...lo que a uno le gusta HACER...pero que nada te impida SER...en este AHORA...que tanto bien HACE al menos a mi...pasar por aqui, y leer tus sentires...y que no es poca cosa Amigo....y te lo agradezco!

Mariano Estrada Vázquez: Gracias, Mirtha: todos tenemos frustraciones, por supuesto. Y carencias. Tal vez porque hay vacíos que no pudieron llenarse o se llenaron de una forma inapropiada o incompleta...

Mónica Acosta: No es para nada ajeno a la realidad de muchos en este mundo, pero para atrás ni para coger impulso.

Mariano Estrada Vázquez: Hola, Mónica: no se trata de volver atrás, se trata de que te queda un resquemor por una carencia, por algo que pudo ser parte de lo que eres y no lo fue

Así estaban las cosas un día después de haber colgado el post. Una de las características de Facebook es que los comentarios suelen producirse el mismo día en el que cuelgas la entrada. Luego se cortan y es raro que haya más.

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
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jueves, 8 de julio de 2010

El burro como metáfora


Foto facilitada por Ramiro Gómez (Mirico) ¿Quien es el acompaña al burro?

El burro como metáfora

El burro es un animal torpe y lento, pero seguro, como aquel producto de Ausonia que se anunciaba tanto en la tele. En realidad, el burro es un personaje entrañable que, por razones que luego se dirán, prácticamente llegó a desaparecer de nuestra vista. Sin embargo, ciertas noticias esperanzadoras nos informan de que últimamente se ha producido una inflexión en la curva de existencias asnales, que desgraciadamente tendía hacia una inexorable extinción. Parece que, por suerte –y porque algunos se han dejado la piel en el empeño, supongo, ya que hay asociaciones para su conservación y defensa (Cela pertenecía a una de ellas)-, el número de ejemplares se ha incrementado bastante en estos últimos años. En Cataluña, concretamente, el incremento ha sido espectacular, de lo que uno naturalmente se congratula.

Para mí, que viví la niñez no en un pueblo, sino en varios, el burro era una parte del paisaje, casi una parte de la comunidad de vecinos, casi una parte de la mismísima familia y, desde luego, tan útil como algunos de sus miembros, dicho sea sin pretensión de ofender. En Muelas de los Caballeros, aunque no con la fuerza del fabuloso Burro Flautista o del literario Platero de Juan Ramón, hubo burros que gozaron de una cierta fama. Por ejemplo: el burro de ti Antolín, que la mereció por los calostros, según las prolongadas ironías de la gente. El burro de Belarmino, que la tuvo por las cosquillas en el lomo, a consecuencia de las cuales, estimuladas a tiempo y con malicia, los incautos se llevaron algunas buenas patadas. El burro de Benito, del que mis hijos creyeron defenderse metiéndose en un callejón sin salida cuando corría juguetonamente tras ellos...

La causa de que los burros se hayan ido extinguiendo, sin duda hay que buscarla en el hecho de que, por una u otra razón, el trabajo se ha ido acabando. Me refiero al trabajo del campo, que es donde han ejercido siempre los burros (Sin prados y con ascensores, la ciudad no ha sido nunca para ellos). Digamos que, perdida su utilidad y su función, quedaban sólo de adorno. Y la gente, claro, no podía permitirse esos lujos. Al final, los burros trabajaban tan poco que hasta llegaron a ser objetos de envidia, como pude comprobar con mis oídos en la conversación que recoge este poema.


El burro como metáfora

Con el jumento a su rabo
Benito va por la calle.
Al banco de los mirones
tan sólo van holgazanes.
Ambrosio es largo de lengua
y sin querer se le sale:

- ¿Adónde llevas el burro?

- A las pradizas, que paste.

- Como esa vida que él lleva
¡quién la llevara, compadre!
Sin brega, palo ni arenga,
la andorga llena y de balde.
¡Quién fuera burro y, como él,
le diera boches al hambre!

- Ninguna ley con justicia
prohibe a un hombre que ande
a cuatro patas, si quiere,
a cinco incluso, si sabe.
Afanes como los tuyos
son relativos afanes,
porque el oficio del burro
sin aprenderlo se sabe.

- Según se miren las cosas.

- Están miradas ecuánimes.

- A mí me dice el caletre
que el rebuznar es un arte,
que el diente debe ser largo,
la oreja debe ser grande...
Y en apetencias del buche
el asno tira al forraje.

- ¿En qué quedamos, entonces?
¿Quieres nadar sin mojarte?

- Quisiera holgar como el burro
pero entre mazas de carne.
¿Qué no es posible? Ya veo
que no es asunto muy fácil.
Y, pues peculio no tengo,
no tengo más que aguantarme.
Donde termina la linde
sanseacabó... y a otra parte.
Descargue el burro en las yerbas
sus apetitos asnales,
que yo me voy con los piensos
a los bocados del aire.

Mariano Estrada. Del libro Trozos de cazuela compartida (1991)