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martes, 20 de abril de 2010

Alborada

Patio interior de la casa de Muelas de los Caballeros, Sanabria-La Carballeda, Zamora

Alborada

¿Cómo no recordar aquellos amaneceres de Muelas, en los que la vida afloraba del oscuro agujero de la noche? Los destellos rojizos de la aurora, los humos incontinentes de las chimeneas, propagadores del inicio de la actividad; los alargados flecos del ruido sobre aquel silencio hondo que se resistía a languidecer, el pausado despertar de los ganados con sus esquilas multiplicadas de latón y hueso, el canto de los gallos, pertinaz, insobornable, repetido... Y, sobre todo ello, la voz larga del bronce: los toques familiares de las campanas que, puntualmente, se incorporaban a la vida de los vecinos con la misma naturalidad que los primeros rayos del sol. Tocan a concejo, tocan a la vecera, tocan a misa… Tocan a despertar.

En cuanto a la zorra… Bueno, eso es algo que no pasaba todos los días. De hecho, muy pocas veces caía una zorra en una trampa... Pero si alguna vez caía, su imagen quedaba plasmada para siempre en la retina de la memoria, especialmente si la retina era de la memoria de un niño...

Alborada

Churín, churaba.
Mi cerda tiene cerditos
que no le sueltan las mamas.

Los perros ladran.

La zorra vino de noche
y no se fue de mañana.
Cayó en la trampa.

La vida toda se alerta.
El gallo, cuando despierta,
arranca el velo del alba.

La zorra pende del lazo,
la lengua afuera, muy larga.
los perros, como no llegan,
le mandan ojos de rabia.

Si pueden la despedazan.

Como ratones, chiquitos,
son mis gatitos.
Parió la gata.

Cuando solté las ovejas
bramó la vaca.
El burro irguió las orejas,
sonó un rebuzno en la cuadra.

En el corral, las gallinas,
por las esquinas
cacareaban.
A un tris estuvo la suerte
de desplumarlas.

La zorra tiene buen pelo
para zamarra.
Cien duros quizás los valga.
La carne para los perros,
que bien la ganan.

En el reloj son en punto
las siete de la mañana.
El sol emerge.
La tierra llama.
El cura anuncia la misa
con las campanas.

Mariano Estrada, Del libro Tierra conmovida (1987)

11 comentarios:

  1. ¿ Como no sentir nostalgia de esta vida tan sabrosamente vivida, que te llena el alma, el corazón y todito tu ser de recuerdos?

    Churín, churaba y Mariano lloraba...

    -- de pura felicidad!

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  2. Churín, churaba,
    detrás de la torre andaba,
    si la torre caía,
    churín callaba...

    Es una especie de adivinanza que me decía mi abuelo...

    Abrazo

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  3. .
    Mmmmmm

    Depende quién sea Churín.... pero haber:

    Un ratón!!! (pues si oyen un ruido se quedan quietecitos)

    Acerté?

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  4. No has acertado.
    Churín eran los cerdidos, que andaban detrás de la Torre, que era la cerda. Si la Torre caía, Churín callaba porque se ponían a mamar.

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  5. .
    Quiero saber más de lo que te contaba y decía tu abuelo!!! Eso abre la imaginación.

    Agua pasa por mi casa, cate de mi corazón

    R=


    Lana sube, lana baja, y el viejito la trabaja?

    R=

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  6. 1º= el kaki
    2º= la cheira de Pepe

    No sé si habrás leído esto:
    http://marianoestradavazquez.blogspot.com.es/2011/03/in-extremis.html

    Abrazos

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  7. 1º= el kaki? jaja ¿que es?

    Es: "aguacate" ? acertaste!

    2º= la cheira de Pepe jajajaj
    Si te refieres a la "navaja" del Pepe... NO acertaste, porque ya ves que navaja se escribe con V. La respuesta es:

    R= Un borrego subido en un elevador !!! jajajja

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  8. El borrego del vecino
    se ha metido en mi corral.
    Mis ovejas, que son tontas,
    no lo dejan de mirar.

    Abracadabrazos

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  9. .
    Abracadabra... patas de cabra

    Un abrazo!

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  10. El silencio, los silencios, las noches largas de los inviernos fríos, las noches calladas. Escuchar los silencios en aquellas noches de cielos cuajados de estrellas... El humo de las chimeneas (el humo incontinente, dices tú)... Las camapanas, los toques a misa, las oraciones (a la entrada de la noches), el angelus, al concejo, al ganado (de las ovejas), la vecera o la vacada... y cada toque con su señal convenida... la zorra y el lobo... y los miedos, ¡ay los miedos! Pueblos hermanos, Mariano. Tú lo dices y señalas a Muelas y yo viví lo mismo, los mismos recuerdos en Valleluengo. (Ver "¿Yo?, de Valleluengo). Abrazos.

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  11. Claro, José: son las mismas costumbres y las mismas actividades porque son pueblos cercanos. Yo estuve una vez en Valleluengo, creo que ya te lo dije en un comentario en el Facebook. Te decía también que allí había una familiia en la que había varios fariles dominicos. Yo recuerdo muy bien a Elaudino, que, por cierto, no sé si llegó a ser fraile...
    Te mando un fuerte abrazo

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