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Ver PPS de Mar:
Mi corazón
Mi corazón está atado
al aldabón de la puerta;
paciente como una mula,
callado como una piedra
¿A quién espera?
A nadie.
Tan sólo sueña.
Los fríos no lo entumecen,
los vientos no lo cimbrean.
Está montado en sus años
y no le duelen las piernas.
¿De qué se nutre?
Del aire.
De la más pura inclemencia.
De los templados calores
de la inocencia.
Mi corazón es el sueño
de una verdad de las buenas:
la juventud sin dinero,
la cuna, la adolescencia,
el hombre con la palabra
y no tan sólo la lengua.
Por eso tengo amarrado
mi corazón a la puerta.
Aquí viví con los hombres
una verdad sin caretas.
Y... ¿qué hay más cierto que el sueño
de una verdad que es eterna?
Del libro "Trozos de cazuela compartida"
Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios
Blog Paisajes Literarios: http://paisajes.blogcindario.com/
Gracias por escribir cosas tan bonitas...
ResponderEliminarGracias a ti por leerlas, Mluisa...
ResponderEliminarLos que nos vimos obligados a dejar la casa en la que fuimos felices de niños, tendremos toda la vida el corazón amarrado a su puerta.
Un fuerte abrazo
Ahora Mariano mi corazón está amarrado a la puerta de una pequeña aldea en Sierra Morena, realmente no estoy arraigado a ningún hogar de niño, pero si es cierto que siento algo parecido a lo que escribes, tarde lo he encontrado pero espero transmitir a mis hijos el amor por el hogar y no el lugar de residencia. Muchas gracias por todos tus escritos que como mi santuario, he encontrado tarde.
ResponderEliminarHola, Ramón:
ResponderEliminarYa sabes lo que dice el refrán: "Nunca es tarde si la dicha es buena".
Seguro que tus hijos van a echar raíces en ese pequeño pueblo de Sierra Morena. Solo es necesario que vivan ahí unos años y que sean felices.
Muy aguda la apreciación entre hogar y lugar de residencia.
Gracias y un abrazo