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martes, 23 de febrero de 2010

Pensamientos emanados de una foto de otoño

Villarrío: un precioso paraje de Muelas de los Caballeros (Zamora)


Pensamientos emanados de una foto de otoño

Ayer le mandé a una amiga un correo con esta foto de otoño, en el que se incluían las dos primeras frases del texto que dejo a continuación. Luego, con estas mismas palabras, fui a poner la foto en la lista de Paisajes Literarios, pero el texto se estiró como si fuera una goma. Quedando como sigue:

"Querida Ausentia: Pasear por las orillas del Fontirín, ver caer las primeras hojas de otoño sobre el agua, sentir el placer de la belleza, pero también el dolor de no tenerte a mi lado para compartirla... Esas son las cosas que, de los días pasados en Muelas de los Caballeros (9,10 y 11 de octubre del 2007), me quedarán para siempre en la memoria. La fotografía es un tenue reflejo de una realidad obsecuente y viva, mucho más de lo que puedas imaginar al contemplarla. Ten en cuenta que faltan los crujidos de la naturaleza emergiendo bruscamente de muy hondos silencios, y los siempre deseados conciertos de los pájaros. Es un sitio excelente para amar, y, en su defecto, para presentir el amor que, un día cualquiera del futuro, buscará aquí las mieles de la dicha".

Pues bien, en este lugar concreto y perdido de la Carballeda zamorana, se comprenden aún menos las cosas que están pasando actualmente en el mundo: insultos, abusos, agresiones, patadas, tortazos, zafiedad, guerras, bombas... Y mucha mala leche sin justificación. No sé, parece que nos va mucho la marcha, pero una marcha mala de solemnidad, burda, hortera, matona, deshumanizada, tirando incluso a fúnebre. Deberíamos forzar un poco la imaginación y ser mucho más vivaces, generosos y divertidos.

Todo el mundo lo sabe, pero nadie parece dispuesto a rectificar para corregir tanta barbarie, tanta estolidez, tanta bazofia. Empezando por los políticos que, además de mentirosos, obscenos y egoístas, son los peores aliados de la convivencia. En realidad son sus más entusiasmados destructores. No hacen otra cosa que insultarse con saña unos a otros, tirarse piedras durante todo el santo día, joderlo todo a su gusto y, sin embargo, no asumir ninguna responsabilidad. Yo estoy harto de oírles, porque es que, además, son unos vulgares vocingleros. ¿O preferís que les llame simplemente bocazas?

Los políticos, al menos los que tocan un poco de poder –y siempre con las debidas excepciones-, son unos individuos que derrochan a manos llenas los fondos que deben administrar por encargo de los ciudadanos, pero de paso corrompen cuanto pueden y malversan incluso la inteligencia, si es que tienen alguna. Y encima les damos de comer en comederas de lujo. Cobran más que nadie y se ríen cuanto quieren de nosotros, que sin duda lo merecemos. ¿Por qué otro nombre llamarles, sino por el suyo? Malandrines. ¿Será éste el que mejor les conviene? Y encima les votamos. Y, para acabarlo de rematar, tenemos que perder para hacerlo una buena parte de la mañana. O de la tarde. Con lo bien que estaríamos a las orillas de un río, paseando por los carriles que la lluvia va dejando en el monte, compartiendo con alguien las cosas reservadas a la intimidad.

Mariano Estrada http://www.mestrada.net/ Paisajes Literarios

5 comentarios:

  1. Mariano, ahí dejo otra de Tip, al final parece hasta algo facha, pero uno quiere a su pueblo, a Valencia y a España, y si me apuras a Europa y el Mundo, porque hay que ser universal, porque hay de todo en Changai y el La Pampa.

    DOS AMIGOS POETAS, EL AUTENTICO Y EL CHIRIGOTA.

    Fontirín es un río,
    un río que pasa por Muelas
    zamorano, para más tronío,
    bello, como una mujer serrana.

    ¡Qué pueblos, Mariano,
    el tuyo y el mío!
    Tú anduviste por aquellos parajes
    y yo por los míos de pequeño.

    Recuerdo aquellas noches de Luna llena
    en la montaña, a las dos de la madrugada,
    mi amigo tocando la guitarra,
    y un servidor la escuchaba.

    Que romanticismo emanaba
    aquella música, solo igualable
    por las Musas Celestiales cuando cantan,
    porque su voz y su cara las delatan.

    Mariano: Muelas, Fontirín, Zamora.
    José Miguel: Enguera, La Mota, Valencia.
    vivencias de dos amigos, que nacieron
    en distintos lares de mi España.


    A ver por donde lo cojes, yo creo que no sabes ni lo que decirme, pero no te preocupes, yo he visto el 0 y he querido convertirlo en un 10, si entra Lidia, eso está hecho.

    Un abrazo

    JMP

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  2. Jobar, Mariano, me he levantado con la ilusión de ver esas contestaciones tuyas tan sabias, y me lo encuentro tal como lo deje. ¿Tan inmensa es mi chorrada esta vez? No ves que se acerca nuestro cumple, tú el 10 y yo el 5 -con lo que soy mayor que tú - y dicen que se vuelve a la niñez, pues ahí me tienes, hecho un bebé, me da miedo nombrar el número de años que nos cae tan pronto, si los intercambiamos son solo 36.

    Un abrazo

    JMp

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  3. Vaya, José Miguel, parece que te han entrado las prisas... La verdad es que aún no había visto tu primer comentario, ya que ayer estuve de parranda por Benidorm, con unos amigos.
    El poema "Dos amigos poetas..." es menos surrealista que los anteriores, o sea menos TIP. En realidad es blanco como el ampo de la nieve. Y no va tanto sobre dos poemas como sobre dos pueblos, que son el tuyo y el mío, como dice esa canción de cruces, montes, olvido y amores que han muerto.
    Es verdad que Lidia convierte en oro todo lo que toca. Siempre ve el vaso medio lleno y siempre tiene palabras de ánimo.
    Felicidades por tu cumple, por si acaso el día 5 me olvido. Por cierto, el mío no es el día diez, sino el doce.
    Un abrazo

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