Buscar este blog

domingo, 15 de agosto de 2010

La parva

Una bielda, un manal y una tornadera, casa familiar, Muelas de los Caballeros

LA PARVA (Ver nota, al final)

Enhiesta sobre la era,
la parva espera.
No hay viento.

El sol aprieta.

Debajo de la carreta
está extendido el almuerzo.

¡Dejad el bieldo!
¡Comamos!
Si sopla el aire, limpiamos,
si no, sacamos
el cuelmo.

Desparramad los manojos
de centeno.
Bajo la meda de trigo
está el manal escondido.
Ayer le puse otro pértigo.

Pasa la bota y... ¡que corra!
Coloca bien la manzorra
y luego acabas el resto.

Del otro lado del monte
viene una brisa gimiendo.

¡Coged el bieldo!

En el montón de la paja
no sólo el hombre trabaja:
también el niño y el viejo.

Si cambia el aire ¿qué hacemos?

Cambiáis la mano.
Lo que no cambia es el grano,
que es más pesado que el viento.

Ya hay tres montones
de paja:
grande, mediano,
pequeño.
De grano hay uno, en el medio.

Grano y ... granzones.
El aire ha dicho que nones
y se han quedado en el muelo.

Deja la pala.
Trae la ceranda más rala,
que está arrimada al sobeo.

Entre el garbillo, negruzcos,
asoman dos cornezuelos.
Más que negruzcos son negros.
¿Quién quiere verlos?
Por los entornos del grano
discurren los barrederos.

El muelo se hace merienda,
como una ofrenda
del cielo:
jamón, chorizo, pizpierno...

Después la tarde se inclina
y el hombre, a golpe de hemina,
enfarda cuentas y sueños:

Para seis cargas colmadas,
dos celemines y medio.
Si no se pria el que queda
por acarrear, o en la meda,
se nos revienta el granero.

Buen año nos ha salido
en paja, grano y ... diviesos.

Del libro Trozos de cazuela compartida (1991)

Nota aclaratoria:

En los entornos de Muelas de los Caballeros (Comarca de Sanabria-La Carballeda, Zamora) se llamaba PARVA al resultado de amontonar la TRILLA y ponerla en disposición de aventar o limpiar (Separar el grano de la paja). Quiero aclararlo porque en otros lugares la parva es lo que en la zona se entiende por trilla (es decir, la mies extendida en forma de redondel para pasarle el trillo por encima, quebrarla y convertirla en paja menuda).
Un MANAL es un utensilio para “majar” a mano, o sea golpear la espiga de centeno y separar el grano de la paja, que en este caso queda tan larga como es. Se compone de dos piezas: pértigo y manueca.
El BIELDO es una especie de “pala-dientes” que se utiliza para limpiar o aventar.Cuando es grande se llama BIELDA y se usa para cargar la paja menuda (trillada) en el carro
El SOBEO es una correa de cuero con la que se ata el yugo al carro.
El CUELMO es una selección de paja larga que se utiliza para hacer velortos y los velortos se utilizan para atar los mañizos, que son haces de paja o de yerba.
Una MEDA es un almiar, es decir, manojos de mies que se amontonan en forma de palloza. El “tejado” está formado por las espigas, sobre las que resbala la lluvia, evitando que se moje la paja.
La MANZORRA es el inicio del tendido de la maja (Dos manojos cruzados. A partir de ahí se extiende el centeno de modo que sólo se ven las espigas, que es sobre las que hay que golpear con el manal para extraer el grano.
Los GRANZONES son los trozos de paja más gruesos y pesados que no se ha llevado el viento al limpiar y quedan en la ceranda cuando se criba el grano. Ahí aparecían también otros elementos, como los cornezuelos etc.
El MUELO es el grano amontonado y dispuesto para ser enfardado en costales o sacos.
La HEMINA es un utensilio para medir el grano, una medida de capacidad. Una CARGA son doce heminas, una hemina son cuatro celemines…
En fin, lo que pretendo con esta nota es ayudar a entender el poema, ya que muchos de los nombres que en él aparecen, hoy resultan extraños, cuando no desconocidos, tanto más cuanto más jóvenes sean los lectores.

Un abrazo

Mariano Estrada

5 comentarios:

  1. Un buen lote de sustantivos al más puro y rancio estilo castellano. Confieso que algunos me eran desconocidos, otros habían quedado en el olvido de no usarlos. El poema refleja muy bien la incertidumbre y ansiedad del labriego en época de "limpia" de la cosecha, cuando no existían las máquinas cosechadoras. Si había brisa ¡manos a la obra!, si no... a cosechar paciencia.
    Un abrazo, poeta.
    Ascensión

    ResponderEliminar
  2. Pues los había apuntado casi todos para buscarlos, no conozco casi nada de esta terminología, pero no implica que no me interese, he escuchado algunas palabras, pero les daba otros significados, me preguntaba... las generaciones más actuales tendremos también esta riqueza en nuestro lenguaje que dejar para una interpretación en el futuro?, me viene sólo el no a la mente... me quiero negar a esa respuesta, pero creo que es lo que ocurrirá. Te dejo una gracias y un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. A mi si me suenan todos esos nombre,lo que pasa es que aqui en asturias,tienen diferente nombre.
    A mi me ha tocado trabajar en el campo un poquito y he de decir que era duro,muy duro.
    Saludos crak.

    ResponderEliminar
  4. Cuanto recuerdo me trae este poema de mi niñez, conozco todas las palabras y todas esas herramientas, vamos que me suena la historia y la recuerdo con cariño, yo tambien soy de la zona aunque desgraciadamente me encuentro lejos de ella.
    Gracias por tus poemas, un saludo.

    ResponderEliminar
  5. Queridos amigos Ascensión, Anónimo, Aladino y Moldón: gracias por vuestros magníficos comentarios. Vosotros metidos en harina y yo disfrutando de unas largas vacaciones. La verdad es que veintitantos días dan mucho de sí, pero se me han hecho cortos. Me he empapado de familia, de amigos, de arte, de naturaleza...
    Un abrazo a todos

    ResponderEliminar