Martina, 10-09-2012
Martina Climent Estrada, 7-9-2012, foto tomada el día 8
Ha nacido Martina
Es público y notorio que, de los muchos poemas que
he escrito a lo largo de mi vida, algunos se los he dedicado a mis hijos,
Patricia y Daniel.
Lo que no es ni público ni notorio es el poema que Patricia
me escribió a mí cuando solo tenía 6 años.
Es éste:
Papá: te quiero
tanto que, cuando miro a las estrellas, pienso en ti. En realidad
pienso en ti todas las horas del día.
¿Tendré
que decir que a mí se me caía la baba? Pues sí, se me caía. Pero no se notaba
demasiado, porque la baba la tenía acumulada en los labios desde el momento en
que nació, incluso antes, cuando daba pataditas en el vientre de Rosa.
Pues
bien, hoy es Patricia la que ha tenido una niña. Se llama Martina. Y ahora es a
Pablo y a ella a los que se les acumula la miel en las comisuras de los labios,
la alegría en el corazón y los sueños en el fondo de los ojos.
Y
Rosa y yo, babeantes de segundo plano, le hemos escrito este pequeño poema:
Martina
Para
un alma de abuelo
que
cree en el amor,
como
verdad profunda
y
humilde de la vida,
Martina
es un asomo de
esperanza,
una
aurora que viene
a
iluminar el mundo.
Rosa
y Mariano. Abuelos.
Villajoyosa,
07-09-2012
Patricia y Pablo, padres felices de Martina
Enhorabuena a esos papis y a estos nuevos y felices abuelos , sobre todo enhorabuena a Martina por ser parte de ellos y poder tenerles cerca , es seguro que no le faltará lo esencial ,el amor ,besos
ResponderEliminarGracias, Maria Luisa: será una delicia verla crecer y correar por la playa, de la que vivirá a muy escaros metros. Le contaremos historias, como hacían antiguamente los abuelos. Si nos deja, a lo mejor somos en parte su televisión...
ResponderEliminarGracias y un abrazo
Enhorabuena a los papas y a los abuelos!! Que maravilla un bebe en la familia, yo estoy disfrutando de mi sobrina y te entiendo perfectamente.. Un poema precioso
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Ceditas: en estos momentos difíciles por los que estamos pasando, hay que ser valientes para tener un niño, en este caso una niña. Patricia y Pablo lo son.
ResponderEliminarY es absolutamente necesario tener niños. Que se animen los jóvenes.
Un abrazo
Todo lo que rezuman tus poemas, tus decires, seguro que dará felicidad a esa nieta, Martina.
ResponderEliminarFelicidades
Gracias, Helena: sí, las cosas de los abuelos pueden ser importantes para los nietos. De momento, yo creo que será ella la que me dé felicidad y me inspire...
ResponderEliminarUn abrazo
Enhorabuena!!!
ResponderEliminarLo de la baba lo entiendo..., a mí se me cae siempre ante un bebé...qué haría yo si fuera "canne de mi canne"!
Falta nos hace un poco de Luz, bienvenida al mundo Martina!
Un abrazote, de esos de palmada sonora en la espalda!
Gracias, Transi: como vienes bastante por La Vila, tal vez un día tengas ocasión de conocerla. Va a vivir en la Playa del Paraíso.
ResponderEliminarEs cierto que nos hace falta un poco de luz. Y una savia nueva.
Te mando un fuerte abrazo. Creo que te lo debo.
Mariano
Rosa/Rosina, Mariano/Marianín:
ResponderEliminarAhora que hablamos en el mismo código de abuelos, entiendo las emociones que os invaden. Comparto vuestra alegría y el gozo inefable de Patricia y Pablo ¡La nena ye más guapina que una xana! ¡Disfrutaila to la familia! Y los amigos también lo compartimos.
Manolo
Sí, Xuanucu, o sea Manolo: ahora hablamos el mismo código y éste no es de barras, sino de estrellas, jaja.
ResponderEliminarHay que ver cómo nos desarma un niño recién nacido. Y qué te voy a decir si es una niña...Espero que podáis conocerla muy pronto.
Gracias por la felicitación y por los buenos deseos.
Un fuerte abrazo
Qué maravilla, Mariano, esta feliz noticia.
ResponderEliminarMartina es una niña preciosa, guapísima (no podía ser de otra manera con esos papás y abuelos tan guapos).
Me alegro muchísimo por todos vosotros y os felicito de todo corazón. Martina va a ser una niña felicísima rodeada de tanto cariño y amor.
Preciosos los versos que le dedicas nada más nacer: un niño siempre viene a traer esperanza y luz a nuestro mundo.
Y no se quedan atrás los versos que te dedicó Patricia a ti con todo su cariño e inocencia: no me extaña que te cayera la babilla...
Un abrazo muy fuerte para todos, besos para la chiquitina y muchísimas felicidades!
Lidia
Querida Lidia: siempre tan atenta, tan cordial, tan generosa...
ResponderEliminarA menudo te he dicho que tus comentarios son racionales, comedidos y certeros. ¿Qué voy a decirte en este caso? Que son cariñosos y dulces. Gracias por ponerte del lado de la sensibilidad, de la felicidad, de la babilla...
Martina no te lo puede agradecer aún, pero te lo agradecemos nosotros en su nombre.
Creo que has entendido muy bien el poema, y me refiero a la parte en la que habla del mundo.
En cuanto al poema de Patricia, ya te puedes imaginar, lo conservo en el corazón como el mayor de los tesoros.
Gracias, Lidieta. Te mando un fuerte abrazo