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Javier del Vigo, Mariano Estrada, Jauan Manuel Díaz
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Advertencia:
El texto que sigue estaba destinado a ser leído en la
presentación del libro de Mariano Estrada, el sábado 14 de septiembre, en lo
que es actualmente el viejo Salón de Estudios de la Escuela Menor, ante el Provincial
de los Dominicos, la Comunidad de Frailes de la Virgen del Camino y los más de
ochenta antiguos alumnos, sus "santas", hijos y amigos que asistimos
a acto tan entrañable. Escrito de puño y letra, como en los tiempos del cuplé,
porque tengo el ordenador hospitalizado. Pero hice caso a la suave ironía de
Ximo (Joaquín López-Malla Ros) y me limité a una intervención espontánea,
realmente breve y muy crítica con Juan Manuel, adulador en demasía de los otros
intervinientes en detrimento de su propia valía, al que osé comparar con otro
Mariano, el Presidente del Gobierno de la Nación, mentiroso e incumplidor
respecto al programa electoral con el que se presentó a las últimas elecciones.
Dirigí el aplauso, obviamente, a Mariano, quien, frente a quienes nos acojonan
con la matraca de la crisis, se crece como un león y publica libros a pares.
Mientras nosotros celebrábamos el homenaje, la Virgen del Camino estaba
en fiestas y las uvas acababan de madurar en los viñedos. Como siempre.
Un escenario para un
poemario
Josemari Cortés colgó en el blog el elenco de quienes esta
tarde vamos a jalear a Mariano Estrada a propósito de la edición de
"Poecanciones de amor".
En el cartel, cada "espada" aparecemos convertidos
en billetes de la antigua peseta, gracias al "photoshop" de Justino
Blanco Villacé, quien superpuso mi careto a la efigie del Marqués de Santa
Cruz, rostro de aires quijotescos que emitió la Fábrica de Moneda y Timbre en
1953, acaso el año que Marito Estrada iniciaba andadura en la escuela de
Muelas, en Zamora.
Así que quedé mosca. Comprobad por qué: Isidro
"vale" mil pesetas; Pablo, cincuenta y Juan Manuel,
veinticinco. Como Mariano. Id a ver el cartel. Me entenderéis, espero. Valgo
-lo peor es que igual es cierto- 0,16 céntimos de euro. Una nadería. No sirvo
ya ni para una pipa de Facundo.
Al pie, Josemari escribió "apoderao". Sin siquiera
la señorial y culta "d" del participio. Si el valor facial del
billete habla del poder del personaje, de la conveniencia de ser uno de la
partida, convendréis conmigo en que, a lo sumo, hubiera podido ser
"sobrero" en el cartel. Manso en una tarde de toros bravos. Que si
apoderado es quien tiene poderes o maestría, soy ya jubilado y estoy reñido con
el poder desde siempre. Ni en mi casa me dan valor.
Ver billetes con los personajes que se citan:
http://antiguosalumnosdominicos.blogia.com/2013/090801-poecanciones-en-la-virgen-del-camino-cartel-.php
http://antiguosalumnosdominicos.blogia.com/2013/090801-poecanciones-en-la-virgen-del-camino-cartel-.php
Así que dejo claro que si acepté estar aquí ahora es única y
exclusivamente por la vieja amistad, intensa y renovada, que me une a Marito
por encima del tiempo y las distancias. Y a todos vosotros, reprimiendo mi
natural vergonzoso, con quienes correteé por estos pasillos, con quienes
estudié en este mismo espacio o vendimié las viñas de alrededor durante
bastantes septiembres, "atropando la menudencia".
Juan Manuel, nuestro presentador, cuando se desmelena hasta
hacernos lanzar la carcajada, dice que tiene un amigo que fue
"apostólico". De su curso, del curso de Mariano. El que hacía primero
de bachiller en 1960. Del mismo curso del que estáis hoy aquí una nutrida
representación: Ximo López Ros, Seque Martín, los Andreses (Cortés y
Trapiello), Pablo Gallego, José Luis Fernández, Javier de Pablos, Maxi Arranz,
Gerardo Barrado, Daniel Orden, Leónides Salvador, Fernando Fernández.. Con
retranca, afirma Manolón que ese amigo, vuestro compañero, trabaja donde otros
nos divertimos
Es ginecólogo. Camilo su nombre, bien lo recordáis.
Veo cierto paralelismo entre Marito y Camilín. Desde hace
cuarenta años, Mariano trabaja y se divierte en el mismo lugar. ¡En
Villajoyosa, mal pensados! Con Rosa siempre de compañera y estrella principal
de su poesía. Frente al mar y al Montiboli, disfrutando de la luz y la
naturaleza. De los hijos y la nieta. De flora y fauna...
Me ha pedido el autor de "Poecanciones" que aquí y
ahora ponga la Historia al servicio de la Poesía. Vano intento. Me conformo con
pergeñar algunos rasgos del escenario donde se ha movido y se mueve Mariano.
Unos retazos biográficos de la historia total que alguien hará un día de
Mariano, el poeta. Aquel muchacho que llegó un día del lejano 1960 a
aquel colegio que se tragó la trampa, en acertada expresión de Isidro
Cicero.
Si entre mis cualidades figurase la austeridad literaria que
le honra a Pedro Sánchez, nuestro Ppedro, aquel director del colegio hace medio
siglo y prior hoy por mérito propio del blog de Josemari, diría con voz pausada
y grave, casi como si fuera aquel Jesús que él personificaba en la
representación de la Pasión de Semana Santa:
-"Mariano Estrada era un chiquillo pequeñajo, pecosillo
y revoltoso que vino a la Virgen del Camino en 1960". (Fin de la cita)
Redondeo yo. En realidad, no ha crecido mucho más Mariano el
resto de los años. Se le han escondido las pecas en el fondo de su alma de
gigante y le creció la pasión por la poesía, la música y el fútbol. La edad le
prohibió seguir la práctica activa del fútbol cuando se hizo sexagenario. En la
Coral Tak, de Madrid, cantó con José Luis Zamanillo, aquel solista que ha
vuelto hoy a León para dirigir un coro de antiguos tiples de aquella escolanía
tan fantástica, desde que se encontraron a fines de los felices sesenta,
alejados ya de la cosmovisión que representó aquel colegio, seminario de
frailes dominicos, donde compartieron filas, silencios y estudios.
Mariano tiene escrito: "vivo de la arquitectura pero
bebo de la poesía". Era un juego de palabras con el que quería dar a
entender una de las dualidades de su vida. Curiosa dualidad, ya que él es
abstemio. Y está jubilado por la edad. Así que la adecuación de la frase
anterior pudiera ser así: Mariano vive y bebe de la poesía porque él es poesía
y vive para la poesía. Trabaja y se divierte engarzando palabras, levantando
poemas, planeando libros. En los blogs que alimenta no se muerde la lengua ante
los desalmados ni ante el "sursum corda".
¿Hay o no hay paralelismos entre la anécdota que relata Xuan
Manuel Díaz, nuestro Manolón, a propósito de Camilín y el "mono" que
tiene Mariano por la poesía, por el amor y la belleza?
Vosotros diréis. En mi ánimo estuvo pintar un
escenario para comprender algunas claves del personaje. De Mariano Estrada, a
quien doy públicamente mi aplauso porque en tiempos de crisis se crece y edita
libros de poesía.
Javier del Vigo
La Virgen del Camino, 14-09-2013
Mariano:
ResponderEliminarCalculando que las fotos muestran sólo un acotado porcentaje de lo que sería el campo visual en su amplitud, puedo sí imaginar la magnitud de todo ese ámbito de encuentro que en realidad rodeaba a la presentación de la cual se da cuenta en este blog.
Fui viendo las distintas secuencias fotográficas y haciéndome idea de lo que habrá sido todo aquéllo, entre presentación literaria
y acercamiento a los reencuentros y recuerdos que habrán sido por demás emocionantes.
Y qué decir, para que suene elogiosamente justo, sobre este discurso de Javier del Vigo.
Tiene el gracejo literario justo para que resulte lo suficientemente adecuado al momento que se estaba viviendo.
Si bien su contenido tiene condimentos de "Códigos de entrecasa", las expresiones allí vertidas me han resultado fáciles de interpretar y se las recibe muy gustosas y amenas para cualquier lector,
como en mi caso, por más que se desconozcan vuestras " internas".
Felicitaciones por todo-y a todos - Mariano, desde el lado oeste del Atlántico,desde esta región mesopotámica de la Argentina.
Con afecto, va mi abrazo.
Victoria
El acto de la presentación, Mariano, una maravilla; con la apoteosis final del concierto musical, dirigido por José Luis Zamanillo, con canciones de siempre y composiciones ex profeso para la ocasión -"estreno mundial", que diría un bilbaíno farolero- del propio Zamanillo y de otro antiguo compañero y solista, Maxi Oloriz. Canciones aderezadas por las recias voces de los "chicos del coro" y la deliciosa voz de Carmen Bocanegra, esa soprano emergente.
ResponderEliminarNo dejo de sentirme pavo real con la cola erecta ante las lisonjas que dirige Victoria a mis párrafos de arriba, con "gracejo literario justo".
A tu través, Mariano, le mando también un abrazo a mujer tan elogiosa, tan sensible, tan sagaz, capaz de entender e interpretar los códigos y jerigonzas que aparecen a lo largo del "discurso".
Victoria, te has ganado un mate, un café o una copita de lo que gustes, si un día nos vemos cara a cara. Estás invitada
Con la debida solicitud de permiso a Mariano para utilizar su blog en esta ocasión, quiero solamente agradecer las gentiles palabras con las que Javi del Vigo se ha referido a mi persona, que superan ampliamente a las pocas con las que he resaltado la calidad de su discurso
Eliminary con quien me siento en deuda por esta desigualdad.
Y sobre todo, quiero agradecer a Javi la invitación que me ha hecho para un eventual "cara a cara".
Veo un tanto lejana esta ocasión, pero como la virtualidad también permite la cercanía, acepto dede ya compartir con él unos sabrosísimos mates amargos, al mejor estilo gauchesco-argentino, ya que es el brebaje que nos identifica, más allá de las raíces europeas que, como en mi caso,
llevamos como sello en nuestra sangre.
¿ Se descubrirá alguna vez el ADN del mate ?
Cordial abrazo para Javi y Mariano, desde la más pura argentinidad.
Victoria - Ciudad de Corrientes- Rep. Argentina
Querido Javier:
EliminarEstamos totalmente de acuerdo en lo que has dicho sobre la presentación y en cuantas otras cosas quieras añadir sobre ella, ya que, habiéndola vivido los dos con disposiciones y ánimos similares, es casi imposible que tengamos alguna percepción diferente, especialmente si hablamos de la parte musical, en la que José Luis y Los chicos del coro nos llevaron a paraísos lejanos pero no del todo perdidos.
Ello, por supuesto, sin desdeñar la parte literaria, en la que todos pusimos nuestro granito de arena.
¿Y qué me dices de la profusión e intensidad de los abrazos? La verdad es que fue un día absolutamente gozoso.
Nuevos abrazos.
Hola, Victoria:
ResponderEliminarCreo que entiendes muy bien el ajetreo en que he vivido estos días. Uno tiene la sensación de querer llegar a todo y no llegar a nada. En cualquier caso, vayan por delante mis disculpas, ya que tengo, al menos, dos o tres respuestas pendientes, como bien sabes.
Por otro lado, me siento más tranquilo porque te ha contestado Javier y veo que ya os habéis entendido. Te advierto de que Javier es muy capaz de llamar a nuestro común amigo Julio Correas e ir con él a Correntes a visitarte. Son un par de gamberros de lo más adorable.
Me alegra que, sin claves previas, hayas podido entrar en nuestros entresijos colegiales, esos intimismos que tienen su origen en la niñez y la adolescencia y que siguen ahí, latentes, en nuestras edades de ahora, que ya van mirando al futuro con cristales de aumento.
Me ha gustado vuestro intercambio de palabras y espero que se prodigue a partir de ahora. Javier es todo un regalo de la divinidad y de la naturaleza, pero no le digas a él que te lo he dicho porque luego me llama "adulador", aunque lo haga con la boca pequeña.
Y nada más, by now.
Gracias y un fuerte abrazo