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El
fuego y sus metáforas
Cuando yo era un pipiolín de ojos
inocentes y de cara amorosamente risueña, me decían que si jugaba con el fuego
me mearía en la cama. Luego supe que la cama era un buen lugar para jugar con el
fuego. Claro que, entre estos dos momentos de la vida -en los que pude darme
cuenta de que el fuego necesita del aire, o sea, del pulmón-, en algún lugar
recóndito de mi inquisitivo cerebro se habían introducido la metáfora y el
fuelle. El fuelle, imprescindible hasta hace poco en las hogueras del mundo, ha
sido relegado por la modernidad y sus reconversiones a un elemento decorativo.
Y la metáfora… Bueno, la metáfora es precisamente lo que a mí me ha permitido
jugar con el fuego sin temor a los diluvios de la noche ni a sus ríos
consecuentes y multiplicados ni a sus monumentales y variadas mojaduras.
El
soplo
Si metiéndome en tus venas
germinara el fuego,
¿qué haría yo, sino bucear en tu
sangre?
Y si es fuego de sol
lo que tu frente acaricia,
heme aquí, palabra tras palabra,
lamiéndote la piel hasta el incendio.
Pero... ¿qué viento te mueve
y hacia dónde?
¿En qué lugar desnudas tu paloma de
agua?
¿Quién se asoma contigo
al soñado balcón de la caricia?
¡¡Nadie!!
¿Nadie?
¿Y qué ha de hacer un fuelle como yo
sino soplar en el vientre de la leña?
¿No es acaso la leña
un fuego encendido en el futuro?
Del libro “Azumbres de la noche”
Mariano Estrada www.mestrada.net Paisajes Literarios
No apto para cardiacos ...elegante y sensual...
ResponderEliminarLa elegancia es una cualidad de la belleza. Me gusta el adjetivo, Mluisa. Gracias
ResponderEliminarQue bello
ResponderEliminarY que buena fotografía. Abrazos y besos voladores. Diana Lucía L.
Envidiablemente bello!
ResponderEliminarMás que frase de libro....
Abrazos nucleares
Gracias, Lucía: la foto no es que sea buena, pero es muy graciosa. A mí me trae recuerdos de otra casa y de otra cama. Un abrazo
ResponderEliminar¿A quién te refieres, Ángela, al poema o al caballero de la cama? Sobre el poema no me pronuncio, sobre el caballero de la cama, sí: es endiabladamente velludo. Un abrazo
ResponderEliminarJajajajaj
EliminarMmmmm
Me río que te trae recuerdos de otra casa y otra cama... Pues cómo poeta? Dónde andabas? Y quien te tomó la foto? Jeje
Estaba en mi casa de entonces y en mi cama de entonces. La foto me la tomo mi mujer. O sea que todo estaba en orden y concierto. Y, como ves, yo estaba absolutamente encantado.
EliminarSabes que es broma verdad?
EliminarComo frase de libro se entiende todo!
Abrazos y. Recuerdos !!!