Rosa y Mariano, 1974-1975
Que
no me miren tus ojos
Que no me den golosinas
tus ojos negros.
Que yo en lo dulce no creo.
Mi credo está en las esquinas
bajo las ruinas
de un beso.
Que no me mande tu cuerpo
dulzuras vanas.
Por fuera van las mañanas,
las tardes van hacia adentro.
Mi corazón va hacia adentro.
A mí me pesan las luces,
a ti te elevan los vientos.
Que no me miren tus ojos,
que no me miren, no veo.
La tarde va hacia la noche,
la noche es negra, soy ciego.
Tus ojos verdes, azules,
azules, verdes... ¡Qué negros!
Mariano
Estrada
Del libro El cielo se hizo de amor (1986)
Preciosa la poesia y la foto también!
ResponderEliminarUn abrazo poeta.
Gracias, MaÁngela: detrás de esta foto hay un montón de recuerdos, como es lógico. Todos bonitos.
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