Elena y Mariano con alumnos en el patio. Foto Mª Ángeles Gualde
Poesía
en el patio. IES Marcos Zaragoza, Villajoyosa. Alumnos de 1º de ESO
Buenos
días a todos:
Este acto constará de dos partes. La primera la haré yo y será distendida, informal,
charlatana y dicharachera. Digamos que quiero convenceros de que la poesía no
muerde ni aburre. Al contrario, veréis que puede ser interesante, cercana e
incluso divertida. La segunda será seria, pero nunca aburrida, y estará a cargo
de Elena Romero Sánchez, esta mujer que tengo a mi lado y que es mucho más
joven que yo, más guapa, más alta y mucho mejor lectora. De su voz vendrá la
poesía con sus mejores galas, que son todas de belleza.
Yo
soy Mariano, que es un nombre compuesto, como veréis: Mar i ano. Soy de
aquellos a los que no se les puede partir el nombre para formar un diminutivo.
Si me llaman Mari, mal. Si me llaman ano, peor. En mi pueblo de nacimiento me
llamaban Marito, que es un mar pequeñito; cosa bien curiosa porque en mi pueblo
de nacimiento no hay mar, ni grande ni pequeño, lo que no impide que haya playa,
pero es de rio, como las truchas. En los tiempos en que yo iba a ligar, hace
muuuuuchos años, cuando conocía a una chica y se interesaba por mi nombre, yo
le decía indefectiblemente: si tú te llamaras María yo sería tu negación:
María, no.
Dicen
que soy poeta, yo no lo voy a desmentir. Ese es el motivo de mi visita. Vuestra
profesora, Mª Ángeles Gualde, me propuso hacer este acto y aquí estoy
(con Elena Romero), agradecido y gustoso, para deciros que la poesía es algo
que os puede ayudar mucho en la vida. Es cierto que no da de comer, pero sí da
de beber, que es algo necesario para acompañar la comida. A vuestra edad, la
poesía debe ser la inseparable compañera del amor, porque a través de la poesía
se canalizan muy bien los sentimientos. O sea que después de hoy, ya podéis
poneros a escribir como auténticos poetas sobrevenidos.
Se
dice que los poemas no hay que explicarlos, pero esto no va con vosotros, que
tenéis 12 años y estáis en un centro de enseñanza para aprender, incluso poesía.
Por lo tanto, todos los poemas que vamos a recitar serán explicados hasta que queden
completamente desnudos. Y después de explicarlos haremos con ellos una segunda lectura
y ya podréis digerirlos como si fueran canciones de Reggaetón.
Nota para los lectores
A
modo de ejemplo, en el primer poema hemos explicado lo que es un sépalo
como amparo de las flores del bien, y éstas las hemos referido a Las
flores del mal, un hermoso libro de Baudelaire, en el que las flores y la
belleza surgen de la realidad más insignificante. Con ello han entendido
perfectamente el poema. Y lo mismo hemos hecho con los poemas siguientes, pero
no vamos a dejar aquí las explicaciones; se entiende que los poemas van a ser
leídos por personas que no las necesitan. Por otra parte, se trata de poemas
muy básicos.
Pétalo y sépalo
-Yo soy un pétalo,
sépalo usted.
Pero si no lo
sabe,
¿qué le vamos a
hacer?
-Pues claro que lo
sepo,
¿no lo voy a
saber?
Soy el único amparo
de
las flores del bien.
He
aquí los otros poemas.
Disparates y otros
Disparates:
Ayer jugamos al
fútbol
con un balón de
pilates.
¿Lo sabías?
Las flores de los hibiscos
se mueren todos
los días.
Buganvilla:
El color está en
la hoja,
la flor es blanca
y sencilla.
Ilusiones.
Creer que todo
París
es un parque de
atracciones.
Vaya fallo,
afirmar que la
caballa
es
la mujer del caballo.
Exceso de amor
La
quise tanto que quise
quererla más todavía.
Llegué a quererla hasta el punto
de ver que no la quería.
Ni tanto ni tan poco
Hubo una vez un
pájaro chorlito
que por poca
cabeza acabó frito.
Y hubo otra vez un
hombre cabezota
que acabó por
chorlito en la picota.
Te sugiero con
mucha sutileza,
que
le apliques el cuento a tu cabeza.
Patricia
Dormir.
Patricia es
la niña
de eterno
dormir.
La nana
que mea la
cama.
La pilla
que duerme
con ojos de
pis.
¡El pis!
Patricia es
la nana
del pis.
La rana.
La lluvia
que todo
lo moja.
El tronco,
la rama,
la hoja...
de abril.
Reconocimiento y paradoja
Qué
tío,
vaya poeta,
va en calzoncillos
y con chaqueta.
Advertencia
Si
quieres irte, te vas,
y una vez que te hayas ido,
no te vuelvas a mirar
para ver si yo te miro
Amores adolescentes
Un rizado, bucle bueno,
despertó a su rizadilla
cuando iba tras el árbol
del deshielo.
Una mueca, ninfa buena,
entre ramas y barbecho
se asomó.
Fuego sí,
frío no.
Y tuvieron deliciosas maravillas,
primaveras encendidas en el pecho.
Y en las sienes,
coros, timbres…
Timbres no:
¡Campanillas!
¿Cómo es el alma?
Le dije un día a un muchacho:
muchacho, ¿cómo es el alma?
No sé -me dijo, con ojos
del alma misma que hablaba.
Seguí con risa de niño
diciendo, ¿cómo es el alma?
Y dijo un hombre: no existe,
no tiene forma, no es nada.
Y preguntando a otros hombres
perdí la forma del alma
que vi salir de los ojos
de un niño, cuando me hablaba.
Aires de
amor
Airecillos
vienen,
airecillos
van,
por el
empedrado,
por el
pedregal.
Desde el
altozano
que mira el
trigal,
se descubre
el valle,
se vislumbra
el mar.
Airecillos
vienen,
airecillos
van,
arrastrando
arrullos
por el
matorral.
Airecillos
vienen,
airecillos
son
de la fuente
de aire
de tu
corazón.
Las cosas claras
-¿Y tú a qué te
dedicas, abuelito?
-A escribir libros.
-Ya, ¿y a qué más?
Te parecía poco.
Quizás porque
intuías
que semejante
profesión
no daba para
muchos caramelos.
-¿Y tú que vas a
ser
cuando seas mayor?
-No lo sé, de
momento
voy a pasar a
Primaria,
después a
Secundaria,
después al Instituto…
-Y luego a la
Universidad, supongo.
-No sé, abuelito,
aún no he tenido
tiempo de pensarlo.
-Pero ¿qué
profesión prefieres,
vamos a ver? ¿Te
gustaría
ser escritora, por
ejemplo?
-Puede, pero antes
hay que ser algo
más... No sé…
Periodista, filóloga,
ingeniera…
Ya veis, las cosas
claras
y el chocolate…
-El chocolate
espeso, claro.
-Claro, claro…
Espeso
y de La Vila.
Sea
este un pequeño homenaje al chocolate vilero, que es realmente magnífico. Yo os
dejo con Elena que, con su mirada especial y los poemas que va a leer, os llegará directamente a las emociones. Bon día i salut
Mariano Estrada, 03-05-2023
Qué buena idea ésta, Mariano, la de mostrar poesía y sus posibilidades, para incentivar, quién sabe, a futuros / as poetas. Una manera desacartonada de mostrar el mundo de la poesía al mundo de los pequeños escolares, desde un lugar tan lúdico y distendido, como lo es un patio, en este caso de una escuela. Qué buena y original manera de proponer un camino, tal vez inimaginable para muchos de los pequeños asistentes, por fuera de la rigidez de las normas y reglas institucionales. Un verdadero acierto a mí entender, que debiera multiplicarse. Tal vez ello sea una punta de lanza para ocasiones similares. Felicitaciones para todos los partícipes de esta idea. Un gran abrazo de Argentinidad ! Victoria
ResponderEliminarMi gusto por la poesía nació, sin aviso previo, precisamente, a través de mi profe de Literatura, materia ésta de la secundaria. El profe Lucero, que así se llamaba, no sólo nos hacía conocer vida y obra de escritores/ poetas, sino que nos hacía incursionar en ese mundo, explicando lo que era una redondilla, una cuarteta, un soneto ,etc., analizando su métrica y su rima y más aún, proponiéndonos ensayar y a escribir nosotros mismos, aplicando tales reglas literarias. Si no hubiese sido así, tal vez hoy en día, a mis 77, bien lejos de aquellos años, tal vez sólo me hubiese conformado con leer los diarios...🤔 Otro abrazo y perdón por este mje. de mi vida personal. Victoria
ResponderEliminarPues estoy de acuerdo, Victoria, con tus opiniones. A los niños, adolescentes y jóvenes de hoy les falta un poco de diversificación. La enseñanza, en general, está dirigida a unos fines concretos entre los que no está el humanismo. Yo pienso que toda enseñanza debería estar impregnada por sutiles gotas de poesía.
ResponderEliminarTu experiencia personal con la literatura es muy enriquecedora. Gracias por contarla aquí. Yo conozco a algunas personas a las que les ha pasado lo mismo. Un fuerte abrazo desde el Mediterráneo donde ya disfrutamos del calor. Un fuerte abrazo